Ante el caso de presunta corrupción de tres ministros de la Corte de Apelaciones de Rancagua, la defensa del suspendido juez Emilio Elgueta presentó sus descargos ante los cargos formulados por la jueza de la Corte Suprema, Rosa María Maggi.

Asimismo, Elgueta acusó al fiscal de O’Higgins, Emiliano Arias, de eventuales faltas al debido proceso, además de crear a una “campaña mediática de desprestigio” en su contra, consigna La Tercera.

“Está en grave riesgo la independencia del Poder Judicial”, dicen los alegatos.

Junto a los ministros Marcelo Vásquez y Marcelo Albornoz, Elgueta es otro más de los suspendidos en su cargo, en calidad de imputado, por eventuales hechos de corrupción al interior del tribunal de alzada rancagüino.

A través del documento legal al que accedió el matutino, donde están los descargos de Elgueta, se explicita una “caducidad del acto administrativo que ordena este procedimiento disciplinario”. Es decir, acusa que estaría fuera de plazo.

En virtud de aquello, se señala que “carece de todo valor el acto por el cual se formuló los cargos contra mi representado, puesto que se hizo meses después de expirados los plazos que concedía el respectivo auto acordado. Seguir adelante con esta investigación no da garantías de un debido proceso”.

Así, el abogado Boris Paredes exigió dejar sin efectos los cargos y pidió el sobreseimiento del suspendido magistrado.

Respecto del fiscal Arias, argumentó que en “varias ocasiones trató de inhabilitar a mi representado con el objeto de formar salas a su conveniencia o antojo, tratando de evitar en la conformación de las salas a ministros que no daban lugar a todos sus caprichos”.

¿Cuáles son los cargos?

Los cargos que formuló la jueza Maggi contra Elgueta son por pedir la contratación de su excónyuge, Alejandra Rebolledo, en la Fiscalía Regional de O’Higgins.

Ante esto, Elgueta reclamó que la mujer habría postulado por recomendación de su hermana, Lorena Rebolledo, quien sería amiga personal del fiscal Arias y se desempeña -supuestamente- como abogada “en la unidad de narcóticos y lavado de dinero en la Fiscalía Nacional”.

Asimismo, por pedir la designación de una exalumna en un juzgado civil. Junto con ello, se le acusan por una gestión similar -con otra estudiante- para la suplencia en otro tribunal. Por este ítem, sostuvo que intentó ayudarla por su cesantía.

Además de lo anterior, la magistrada le imputa haber intervenido en la tramitación y fallo de Luis Arenas, médico condenado por tráfico de psicotrópicos en 2016. Respecto de aquello, Elgueta descartó una amistad, argumentando una hermandad de la logia masónica, y también aseguró que el cargo está prescrito.

Y finalmente, se le acusa de haber mantenido comunicación telefónica con abogados de 7 causas, lo cual es negado por la defensa de Elgueta. “No tuvo intervención de naturaleza alguna, lo que revela la falta de prolijidad”, concluyó Paredes.