En su visita al Bío Bío, la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, se refirió a la situación ocurrida en Quillón, donde 21 personas están en observación tras ser vacunadas con dosis que presentaron una falla en la cadena de frío.

En concreto, de acuerdo a la información a la accedió BioBioChile, las dosis habrían superado en 2 grados el mínimo recomendado por los fabricantes para su aplicación.

La subsecretaria afirmó que solicitaron una investigación por el hecho y reconoció que las vacunas estaban a mayor temperatura.

Por ello, anunció que se abrió un sumario para identificar posibles responsabilidades en este hecho y que los inoculados se mantienen en observación para detectar posibles efectos adversos.

Respecto al resto de las vacunas con problemas de temperatura y que sobraron, indicó que se estableció una cuarentena para evaluar su desarrollo y establecer si se podrán utilizar.