El ministro de Justicia, Hernán Larraín, se refirió a la postura de los comuneros mapuches en huelga de hambre en Angol, afirmando que han intentado dialogar con ellos, pero que sus peticiones exceden las facultades del Ministerio o de Gendarmería.

“Las peticiones -he estado reunido en el día de ayer con ellos- exceden lo que Gendarmería o este Ministerio pueden hacer. Es decir, peticiones que van más allá de la normativa legal y reglamentaria que existe”, señaló.

De acuerdo a Larraín, los comuneros originalmente pedían la libertad de todos los presos mapuches o la devolución de las tierras ancestrales. “Una serie de otras inquietudes que obviamente son imposibles de atender, no digo por un Ministerio o por Gendarmería, por un Gobierno. Son cuestiones que atañen a una política del Estado que se tienen que canalizar por otras vías”, puntualizó.

En la misma línea, indicó que ahora piden terminar con las prisiones preventivas contra acusados mapuches, algo que Larraín explicó “no depende ni de Gendarmería ni del Ministerio otorgarlo”.

“Se les ha facilitado la Defensoría Penal, a la cual todos tienen acceso, pero no quieren encargarle esa solicitud a la Defensoría Penal, que en otros lugares como en Temuco, sí se ha hecho y han permitido el cambio de medida cautelar cuando los jueces así lo determinan.Esa ha sido una solución”, sostiene.

Además, los comuneros también han pedido cambios de unidades penales, para trasladarse a Centros de Educación y Trabajo. “Eso ciertamente todos pueden acceder cuando cumplen los requisitos, y las personas por las cuales se está solicitando, no los cumplen”, agrega.

Igualmente, Larraín sostiene que trabajarán en la aplicación del covenio 169 de la OIT, pero que algunas peticiones buscan beneficios o libertades que solo la justicia puede otorgar.

“Hemos manifestado nuestra voluntad de adecuar nuestro sistema de justicia penal, nuestro sistema penitenciario, a compromisos internacionales como los que establece el Convenio 169 de la OIT, que tiene una mirada especial para quienes están privados de libertad y pertenecen a los pueblos originarios”, detalla.