Se declaró como “zona saturada” la cuenca del Lago Villarrica, lo que permitirá ejecutar un plan de descontaminación.

El inédito decreto fue confeccionado luego que estudios realizados desde el 2013, los que evidenciaron la constante superación de los parámetros de calidad del agua.

Luego de la publicación de la norma secundaria de calidad ambiental, se han realizado monitoreos permanentes que han dado cuenta que los niveles máximos de fósforo, nitrógeno, clorofila y transparencia superan en un 80% los permitidos.

El documento fue firmado por los exministros de Medio Ambiente, Obras Públicas y Defensa, pero faltaba la firma de Michelle Bachelet, lo que se concretó el pasado 7 de marzo.

La vocera del movimiento “Aguas Libres Villarrica”, Alejandra Aillapán, calificó como positiva la acción, pero lamentó que las autoridades tardaran tanto tiempo en tomar medidas para proteger el lago.

El director de Relaciones Públicas y Marketing de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Villarrica, Mauricio Molina, también consideró que se está trabajando demasiado lento y esperó que los turistas colaboren en la protección del medio ambiente.

Molina cree que las autoridades comunales de Villarrica, Pucón y Curarrehue no demuestran interés en el tema o probablemente no quieren difundir el problema por miedo a que los turistas dejen de visitar la zona.

Actualmente el decreto se encuentra en trámite, es decir, a la espera de la toma de razón por parte de la Contraloría.

A contar del 7 de marzo comenzó un plazo de 90 días para dar inicio a la tramitación del plan de descontaminación del Lago Villarrica, que se realizará por primera vez en nuestro país.

Algunas de las sugerencias para el plan de descontaminación está la instalación de un sistema de alcantarillado entre Villarrica y Pucón, una planta de tratamiento de aguas servidas para Currarrehue, un plan de reforestación, manejo de las pisciculturas con normas de protección de los ríos, entre otros.