Posterior al plebiscito de salida del pasado domingo, partidos políticos de la oposición solicitaron al Gobierno poner urgencia al proyecto de ley que establece el voto obligatorio en todas las elecciones.

Más de 13 millones personas, de un padrón de 15 millones habilitadas para sufragar, votaron en el plebiscito de salida del pasado domingo, transformando esta elección en un proceso histórico en cuanto a participación. Esto estuvo determinado, en gran parte, por el voto obligatorio, suprimido en 2012.

Con el resultado en la mano, dirigentes políticos, principalmente de la oposición, solicitaron al Gobierno que el sufragio obligatorio se mantenga para todas las votaciones que vengan, y que el Ejecutivo califique con alguna urgencia el proyecto de ley que así lo establece.

La diputada de Renovación Nacional, Francesca Muñoz, señaló que la obligatoriedad del voto en el plebiscito de salida generó un sentimiento de pertenencia y responsabilidad con el país.

En la misma línea, el diputado de la UDI, Guillermo Ramírez, afirmó que el voto obligatorio le otorga mayor legitimidad al proceso electoral y “ayuda a la moderación”.

Desde el oficialismo, el diputado del Partido Socialista, Jaime Naranjo, aseguró que ha sido siempre la derecha la que ha querido que las elecciones sean con voto voluntario, pero que -de todas formas- valora que este sector ahora busque el sufragio obligatorio.

La iniciativa que restablece el voto obligatorio fue aprobada el año pasado por la Cámara de Diputadas y Diputados, pero actualmente descansa en el Senado.