Esta jornada de martes se espera que la Cámara de Diputadas y Diputados vote el controversial proyecto de ley de fraccionamiento, tras el paso de la iniciativa por una comisión mixta.
Recordemos que, con esto, se propone una nueva norma para la distribución de las cuotas globales de captura para 23 pesquerías de importancia comercial a nivel nacional, entre el sector artesanal e industrial. La discusión se ha realizado recurso a recurso, especie a especie, de manera abierta y transparente.
El respaldo en las distintas etapas legislativas previas:
– Cámara de Diputadas y Diputados: Aprobación con 111 votos a favor.
– Senado: Aprobado con 40 votos a favor y solo 1 en contra.
– Cámara tercer trámite: 136 votos a favor.
El camino legislativo de la ley de fraccionamiento
¿Qué pasó en la comisión mixta? En total, 19 pesquerías quedaron resueltas previo a la comisión mixta y no fueron parte de dicha discusión. En la instancia, fueron objeto recursos como la anchoveta y sardina del norte, y la merluza común entre Coquimbo y Los Lagos.
En tanto, la sardina y anchoveta en el norte: Se acordó una fórmula definitiva para esta pesquería, que durante años ha sido símbolo de injusticia y concentración de cuotas.
La actual ley fija un 85% para el sector industrial y un 15% para el artesanal, en circunstancias que son recursos que están y se desarrollan en el ARPA, que son las primeras cinco millas (Área de Reserva para la Pesca Artesanal).
Fraccionamiento en la iniciativa
Con lo acordado se fija un fraccionamiento dinámico con punto de partida en 55% artesanal y 45% industrial, y un rango que puede ajustarse anualmente entre 85%-55% para el sector artesanal y 15%-45% para el industrial.
Igualmente, se reconoce una mayor participación inicial del sector artesanal y define reglas claras para su ajuste en el tiempo: si el sector industrial no captura su cuota, el año siguiente la fracción artesanal aumentará en 10 puntos.
– Merluza común (de Coquimbo a Los Lagos): Se aprobó una fórmula en base a un acuerdo logrado a partir de una indicación transversal de senadores PC, PS y UDI, que incluyó tres aspectos clave (fraccionamiento escalonado, fiscalización reforzada y medidas en torno al recurso Besugo).
La actual ley fija un 60% para el sector industrial y un 40% para el artesanal, por ende se concreta un avance para el sector artesanal.
– Fraccionamiento escalonado: Si la cuota global es igual o menor a 35.020 toneladas (cifra de este año), se fija un reparto de 45% artesanal y 55% industrial. Si la cuota supera ese umbral, todo el aumento se destina al sector artesanal hasta llegar al 50/50. Esta regla se aplicará cada año.
Llegar al 50% se traducirá en un aumento para el sector artesanal de un 25% respecto a la cuota que tienen actualmente (al pasar del 40% al 50% como cuota total del sector).
– Fiscalización reforzada: Fiscalización obligatoria presencial para toda la flota industrial y artesanal. En el caso de las artesanales menores de 12 metros, será en zonas prioritarias definidas por Sernapesca.
– Marco para la pesca del Besugo: La comisión acordó reglas para su fraccionamiento en caso de que el Comité Científico -organismo asesor independiente del gobierno de turno- recomiende levantar su veda, resguardando criterios científicos y dando certeza regulatoria. Está actualmente en situación de sucesivas vedas.
– Financiamiento: Para evitar impactos sobre el presupuesto fiscal, se acordó una alternativa específica que implica crear una patente especial para los armadores industriales que adquieran cuotas internacionales de jurel mediante transferencias desde otros países miembros de la OROP-PS y que sean capturadas en la zona económica exclusiva de Chile. Cobro sería por tonelada. Esta patente sólo aplica al sector industrial. El sector artesanal queda expresamente exento.
– Cifras redistribución: La propia Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca) cifró un traspaso neto de recursos desde la industria a los pescadores artesanales del orden de los 160 millones de dólares con esta reforma.
– Gradualidad de la reineta: El fraccionamiento de la reineta no fue discusión de la comisión mixta, dado que fue resuelto en etapas previas (90% artesanal y 10% industrial).
Lo que sí vio la mixta fue que la cuota global de captura de la reineta deberá fijarse bajo criterios de sustentabilidad, es decir, apuntando al rendimiento máximo sostenido (RMS). Además, se limita su variación anual a un máximo de 5%, lo que busca evitar fluctuaciones abruptas y otorgar estabilidad económica y certeza a pescadores y comunidades costeras.
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