Los Fantasmas fue considerada una de las bandas más peligrosas y violentas que operaban en la región Metropolitana.

La Policía española detuvo a dos chilenos acusados de pertenecer a la banda de Los Fantasmas, que supuestamente actúa en España tras haber sido desmantelada en nuestro país.

Según informó este lunes la Policía, las detenciones de estos dos chilenos de 34 y 56 años se produjeron en la ciudad de Algeciras, en sur de España, donde la pasada semana fueron detenidas otras dos personas por su supuesta pertenencia a esta organización.

De acuerdo a la investigación policial, los detenidos están vinculados a Los Fantasmas, una peligrosa banda desmantelada en Chile en 2019.

Luego de la detención de sus principales líderes, algunos de sus supuestos miembros se trasladaron a España, donde actúan en zonas comerciales, inmediaciones de entidades bancarias o lugares de gran afluencia de turistas, de acuerdo la Policía.

La organización es investigada por delitos como organización criminal, estafa bancaria, falsedad documental y usurpación de identidad, por robos con fuerza en vehículos y comercios o compras con tarjetas bancarias robadas.

La banda emplea técnicas como el pinchazo de una rueda del auto de la víctima, para obligar a que se baje y aprovechar para sustraerle la cartera, tarjetas bancarias y objetos de valor, o distracciones como llamar su atención haciendo como que se le cayó dinero, según la Policía.

Recordemos que Los Fantasmas fue considerada una de las bandas más peligrosas y violentas que operaban en la región Metropolitana.

Los integrantes del grupo se dedicaban a cometer robos con intimidación bajo la modalidad conocida como “salida de bancos”, donde marcaban a clientes que retiraban altas sumas de dinero, para asaltarlos posteriormente.

Tras una investigación que duró 11 meses, la Policía de Investigaciones detuvo a 16 sujetos vinculados a la organización, que fue acusada de estar involucrada en al menos 31 delitos.

Además, en esa época se determinó que la agrupación tenía un patrimonio de más de mil millones de pesos, incautándose 13 vehículos, armas, parcelas, propiedades y joyas.

Incluso, dentro de sus miembros estaba un funcionario policial, quien fue vinculado a al menos cuatro robos con intimidación y habría estado a cargo de coordinar a la banda para cometer los delitos.