El Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) del Ministerio de Salud evalúa la pertinencia de administrar una dosis de refuerzo, tras completar el esquema de vacunas contra el coronavirus, a pacientes con ciertas condiciones que determinan inmunosupresión.

En este contexto, la institución ya autorizó la administración de una dosis adicional de vacuna contra el SARS-CoV-2 a diez pacientes en Chile, cuyas situaciones han sido evaluadas caso a caso.

Según lo publicado por el Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), las personas que viven con infección por VIH y las que reciben medicamentos inmunosupresores pueden tener mayor riesgo de contraer covid-19 grave.

Actualmente, no existen datos para establecer la seguridad y eficacia de las vacunas contra el SARS-CoV-2 en estos grupos. Sin embargo, dado que las vacunas autorizadas son inactivadas o de plataformas nuevas tales como RNAm, vector viral, pueden administrarse de manera segura a personas inmunodeprimidas.

Por otra parte, se ha observado una respuesta inmune débil luego de una segunda dosis de vacuna contra el coronavirus en trasplantados que habían recibido dos dosis de vacuna.

Esta información llevó a la Autoridad Nacional de Salud de Francia a recomendar el uso de una dosis adicional en pacientes inmunodeprimidos. Un estudio mostró que la administración de una nueva dosis de la vacuna BNT162b2 en trasplantados mejoró significativamente la inmunogenicidad del medicamento, sin casos de covid-19 informado en los pacientes.

Situación de pacientes chilenos

Las diez personas autorizadas a recibir una dosis de refuerzo cumplen con la condición de estar cursando con una enfermedad inmunosupresora y que su médico tratante ha derivado una solicitud al nivel central. Los pacientes son portadores de inmunosupresión debido a leucemia, linfomas, mielomas o son usuarios de terapia biológica o inmunosupresión prolongada.

Desde el año 2018, el PNI tiene un documento denominado “Recomendaciones para la vacunación pacientes con necesidades especiales”, que identifica situaciones absolutamente excepcionales, tales como embarazo, recién nacidos prematuros, alteraciones congénitas, cuadros leucémicos, linfomas, cánceres generalizados, compromiso inmunológico, esplenectomía, etc.

Estas vacunas son sólo para casos específicos, fuera de calendario y con autorización de un médico.