Este lunes, el presidente Sebastián Piñera cuestionó que “en los últimos tiempos han proliferado muchas mociones de parlamentarios que se están tramitando en el Congreso, que pudiendo estar bien inspiradas, son inconstitucionales porque no respetan las atribuciones que la Constitución otorga al Congreso Nacional y que los parlamentarios juraron cumplir y hacer cumplir”.

“Algunos han reconocido explícitamente la inconstitucionalidad de sus proyectos, sin embargo, perseveran en ellos en virtud de la bondad de sus objetivos como si el fin justificase los medios”, sostuvo, agregando que “la Constitución y las leyes y el respeto de las mismas son elementos y condiciones fundamentales para la existencia y el buen funcionamiento de nuestra democracia, de nuestra república y el Estado de Derecho”.

Argumentó que “igual como el Derecho Internacional protege a los países más débiles de los posibles abusos de los países más poderosos, la Constitución y las leyes dan estabilidad y certeza y protegen a todas las personas, y especialmente a los más vulnerables, de la discrecionalidad y los abusos, porque en un Estado de Derecho todos debemos cumplir la ley y nadie está por encima de la ley, la cual es igual para todos”.

Fundamentó en este sentido que “un principio y condición esencial para el buen funcionamiento de la democracia es el respeto al Estado de Derecho y que nadie pueda pretender, ni siquiera invocando la nobleza de sus propósitos, estar por encima de la Constitución”.

“Entre las principales causas que conducen a la destrucción de las democracias está el no respeto a la Constitución y las leyes y el pasar por encima de la institucionalidad”, advirtió, llamando a las autoridades a respetar la carta magna.

Por motivos como estos es que “además de utilizar todos los instrumentos que la propia Constitución me otorga para hacer cumplir la Constitución y las leyes, en los próximos días convocaré a un grupo de exparlamentarios, académicos y expertos para proponer perfeccionamientos a los criterios y procedimientos con que el Congreso determina la admisibilidad o inadmisibilidad de las mociones y proyectos de ley, de forma de evitar que progresen mociones que no respetan la Constitución”, adelantó.