La ministra Romy Rutherford dejó bajo arresto al general Alejandro Villagra Ramírez, como acusado de dos delitos de fraude fiscal. El uniformado es el primero del nuevo alto mando en ser investigado en la denominada arista “empresas de turismo”.

Asimismo, se resolvió un embargo de bienes del general Villagra por $11 millones de pesos, “para satisfacer en forma suficiente el pago de los perjuicios”.

Tras tres jornadas de interrogatorio, la jueza lo dejó en calidad de detenido en el Batallón de Policía Militar de Peñalolén por un plazo de cinco días, sin embargo se informó que tomará la decisión de un eventual procesamiento antes del feriado del viernes.

Villagra es el actual comandante de Primera Brigada Acorazada del ejército. Su abogado, Juan Carlos Maríquez, insistió en su inocencia y destacó que tienen prueba para acreditarla y no descartó recurrir al tribunal constitucional por el recurso para anular los interrogatorios al alto uniformado.

Rutherford investiga las comisiones de servicio en el extranjero de los oficiales y suboficiales de la institución castrense, donde algunos funcionarios abultaron los precios de los pasajes aéreos y fletes para obtener devoluciones desde las agencias de turismo o utilizaban estos dineros para viajar a otros destinos junto a sus familiares.

En el caso de Villagra, se le indaga por la devolución de 13 mil dólares por tickets aéreos más otros 400 dólares por fletes.

Durante la tarde, la ministra careó al general con Victoria Latrach, dueña de una agencia de viajes.

Según las fuentes consultadas en la institución, se tiene descartada su eventual baja en caso que la ministra Rutherford lo someta a proceso.