Parlamentarios denunciaron delitos bancarios en el cajero automático al interior del Congreso, justo cuando se discutía la responsabilidad de los usuarios en caso de robo, fraude, u otro incidente asociado. Tras conocerse lo anterior, el dispensador fue clausurado.
Según detalló El Mercurio, el diputado Renato Garín dio cuenta en la Sala que “en este mismo Congreso, presidente, está atestiguado que en el cajero automático que está en el pasillo, entre la Cámara y el Senado, en el piso segundo, ha ocurrido clonación de tarjetas. Más de una vez, de hecho”.
El parlamentario del Frente Amplio detalló que no alcanzaron a robarle dinero, ya que su banco le avisó de manera oportuna, por lo que pudieron evitar la realización de transacciones.
Quien también acusó un hecho similar fue el senador Manuel José Ossandón, detallando que su conductor sufrió la pérdida de 200 mil pesos tras utilizar un dispensador en el lugar.
“Si en el Congreso, adentro del Congreso, te clonan la tarjeta, imagina lo que puede ocurrir afuera”, sentenció Ossandón, quien impulsó la iniciativa que hoy pasó a tercer trámite.
Pese a estas situaciones, desde el Parlamento dijeron desconocer si existe alguna denuncia.
