La centroizquierda se comenzó a rearticular en función del debate legislativo de la reforma a las pensiones. Desde la oposición han insistido en la petición de dividir el proyecto, para abordar de forma individual el fortalecimiento del pilar solidario, cuya solicitud ha sido sistemáticamente negada por el Gobierno.

Sin embargo, antes de comenzar la discusión en la Comisión de Trabajo, los diputados pusieron otras condiciones al debate: que un ente público administre el 4% extra de cotización individual, con cargo al empleador, que contempla la iniciativa.

En concreto, el diseño que piden reflotar es el que incorporaba la reforma de pensiones de la administración Bachelet: el Consejo de Ahorro Colectivo (CAC).

En la ex Nueva Mayoría, sostienen que incorporar una figura similar acercaría las posiciones con La Moneda. De momento, “no la hay. Y creo que es una debilidad del proyecto y, por lo tanto, creo que hay que proponer crear una entidad pública que pueda administrar los fondos de pensiones de los trabajadores chilenos”, señaló el diputado y jefe de bancada del Partido Socialista, Manuel Monsalve.

Ayer lunes, parlamentarios de oposición ponían en duda aprobar la idea de legislar el proyecto si no se dividía la discusión. Desde el Frente Amplio señalaron que aún no toman una determinación frente al proyecto, pero si no se incluye una fórmula de reparto, será difícil aprobar el proyecto, remarcó la diputada de la Izquierda Libertaria, Gael Yeomans.

Desde el oficialismo, el diputado de la UDI, Guillermo Ramírez, señaló que la creación de un ente estatal se puede conversar, pero que no debería tener este organismo el monopolio de la administración de la cotización extra.

Para dar paso a la solicitud, el Gobierno ha señalado que BancoEstado, a través de su administradora general de fondos, podría entrar a competir por administrar el 4% de cotización adicional.