Revolución Democrática se refirió a la denuncia por la donación al partido de un cuestionado magnate estadounidense, explicando que el aporte sólo fue realizado en 2012.

Según la denuncia -que corresponde a una filtración del grupo de hackers DCLeacks-, la colectividad de Giorgio Jackson recibió tres pagos de una de las fundaciones de George Soros, multimillonario y filántropo.

Soros es una de las personas más ricas del mundo, según Forbes, y es conocido por ser quien provocó la quiebra del Banco de Inglaterra en 1992.

A mediados de este año, los documentos del magnate fueron hackeados, saliendo a la luz el financiamiento a políticos por parte de sus fundaciones, según la información recogida por el portal Chilecorrupcion.com.

De acuerdo a uno de los archivos, Open Society Foundation donó 74.700 dólares entre 2013 y 2015 a Revolución Democrática para ayudar en el financiamiento de las actividades del “movimiento estudiantil” y crear un sustento financiero en el largo plazo.

El diputado Giorgio Jackson aseguró que la “denuncia es lo de siempre: mienten y tergiversan para tratar de meternos en su mismo saco”.

El parlamentario descartó que fueran tres pagos, explicando que cuando se estaban organizando en 2012, postularon a fondos internacionales para hacer una síntesis sobre las demandas en educación y democratización.

“Nos adjudicamos sólo un fondo de Open Society Foundation, en 2012. Realizamos actividades, elaboramos productos entregables y lo rendimos como corresponde”, sentenció.

“Entraron, en 2012, 12 millones de pesos que se ejecutaron y se rindieron, realizando todos los compromisos, cumpliendo la normativa vigente y pagando todos los impuestos correspondientes. Desde ese momento no hemos vuelto a recibir fondos de la Open Society”, afirmaron desde el partido al diario La Segunda.

Jackson recalcó que “esta fundación apoya muchas iniciativas prodemocracia en el mundo. Por ejemplo en Chile apoyan iniciativas valiosas como Ciper y Ciudadano Inteligente“.

Por último aseguró que desde su constitución, Revolución Democrática es financiada con cuotas voluntarias de militantes.