El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, captó la atención de los medios de comunicación en América Latina, luego que hiciera un llamado a los reyes de España y al papa Francisco, a pedir disculpas por los abusos cometidos durante la época de la Conquista de América.
En un gesto sin precedentes en la historia reciente de México, López-Obrador, nieto de un español, dijo el lunes haber enviado “una carta al rey de España y otra carta al papa (Francisco), para que se haga un relato de agravios y se pida perdón a los pueblos originarios por las violaciones a lo que ahora se conoce como derechos humanos”.
El mandatario izquierdista tuvo este gesto al cumplirse 500 años de la batalla de Centla, considerada el primer enfrentamiento del conquistador español Hernán Cortés contra pueblos originarios de México, en este caso los mayas-chontales del actual estado de Tabasco, de donde es oriundo López Obrador.
Estamos en Comalcalco, vamos a Centla a conmemorar 500 años de la batalla de los españoles contra la resistencia de los mayas-chontales. pic.twitter.com/glYO0eAMtX
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) March 25, 2019
Aunque la petición de AMLO ha sido fuertemente rechazada en España, donde el gobierno del socialista Pedro Sánchez descartó que el país o la Casa Real deban pedir disculpas, al menos existen antecedentes de países o instituciones que han pedido disculpas por actos cometidos muchos años -y hasta siglos- atrás.
Macron pide disculpas a Argelia
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, pidió disculpas en septiembre pasado y reconoció que su país ocupó métodos de torturas contra disidentes durante la ocupación de Argelia, algo que desató la ira de antiguos colonos franceses en África, quienes fueron expulsados tras la guerra de independencia.
Un año antes, Macron también reconoció los crímenes de su país en contra de las colonias africanas, aunque no ha ofrecido una disculpa de carácter oficial.
“Hay errores y crímenes, grandes cosas e historias felices”, pero “los crímenes de la colonización europea son innegables”, declaró el presidente Macron. Es “un pasado que debe pasar”.
Japón a víctimas de esclavas sexuales
Un país que ha pedido perdón durante los últimos 25 años es Japón, que en 1995, 2005 y 2015, pidió disculpas de formas oficial por las atrocidades y crímenes que cometió el país durante la Segunda Guerra Mundial, particularmente por su invasión a Asia y el secuestro de mujeres usadas como esclavas sexuales.
El uso de mujeres asiáticas -principalmente coreanas- se extendió desde la década de los 30′ hasta fines de la Segunda Guerra Mundial, siendo violadas y abusadas por los soldados nipones, algo reconocido por Tokio y que en 2015 selló un pacto histórico con Corea del Sur para la creación de un millonario fondo de compensación.
En la ocasión, el canciller japonés, Fumio Kishida, informó que el primer ministro, Shinzo Abe, “expresa de nuevo sus más sinceras disculpas y remordimiento a todas las mujeres que fueron sometidas a inconmensurables y dolorosas experiencias y sufrieron incurables heridas físicas y psicológicas como ‘mujeres de confort’”, reportó la cadena CNN en Español.
Reino Unido a Kenia
Un caso extraño es del Reino Unido, que en 2013 pidió disculpas por los abusos cometidos a mediados del Siglo XX en su colonia en Kenia, cuando reprimió y persiguió violentamente a los miembros de la tribu Mau Mau, quienes lideraron la rebelión keniata en la década de los 50.
Según consigna el portal de la BBC, el canciller británico de 2013, William Hague, ofreció disculpas a nombre de su gobierno y de la corona, junto con financiar la instalación de un monumento en honor a la tribu Mau Mau en Nairobi.
“El Gobierno británico reconoce que los kenianos fueron sometidos a torturas y otras formas de malos tratos a manos de la administración colonial. El gobierno británico lamenta sinceramente que se hayan cometido estos abusos y que hayan empañado el progreso de Kenia hacia la independencia. La tortura y los malos tratos son aberrantes violaciones de la dignidad humana que condenamos sin reservas”, declaró Hague ante el congreso.
Vaticano y la inquisición
Durante su oratoria, López Obrador también aludió al papa Francisco por la responsabilidad de la Iglesia Católica durante la Conquista de América, una institución que ha pedido disculpas por sus “errores” aunque años después de cometerlos.
El pontificado de Juan Pablo II (1978-2005) estuvo marcado por sus peticiones de perdón por el rol de la Iglesia en diferentes episodios, como el caso del Holocausto, la Inquisición o la persecución a judíos, las Cruzadas o la marginación de las mujeres.
“Nunca más ofensas hacia ningún pueblo, nunca más recurso a la lógica de la violencia, nunca más discriminaciones, exclusiones, opresiones, desprecio hacia los pobres y hacia los desposeídos”, declaró en 2000, celebrando los dos milenios de la Iglesia Católica, consignó el diario español El País.
Un hecho más curioso se produjo en 1992, durante la conmemoración de los 500 años del Descubrimiento de América, cuando Juan Pablo II reconoció que hubo un error en la condena contra Galileo Galilei por parte del Tribunal de la Inquisición.
El científico italiano fue condenado en 1633 por la Inquisición, luego que éstos consideraran una herejía su teoría de que la Tierra giraba alrededor del Sol, contrariando las enseñanzas de aquellos años por parte de la Iglesia.
“(Los jueces) creyeron erróneamente que la adopción de la revolución copernicana ( … ) socavaba la tradición católica. Ese error de juicio, que hoy nos parece tan claro, les indujo a una medida disciplinaria por la que Galileo sufrió mucho”, dijo el Papa en aquella ocasión.
Galilei sería condenado a prisión perpetua, que luego sería conmutada a un arresto domiciliario de por vida, pasando sus últimos años alejado de la vida pública.
Desde el Vaticano respondieron a AMLO, donde recordaron que los últimos tres pontífices (Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco) han pedido disculpas a los pueblos indígenas de América Latina.
“Pido humildemente perdón, no sólo por las ofensas de la propia Iglesia, sino por los crímenes contra los pueblos originarios durante la llamada Consquita de América”, reconoció Francisco en 2015, durante una visita a Bolivia.
