El derrumbe el sábado de varios edificios en Sicilia tras una explosión al parecer por una fuga de gas -que causó la muerte de al menos siete personas-- reabrió en Italia el debate sobre los riesgos hidrogeológicos y el estado de sus infraestructuras.

Siete personas han muerto y se busca a otras dos desaparecidas tras una explosión de gas ocurrida en la noche del sábado en el municipio de Ravanusa, en Sicilia (sur).

El hecho provocó también la evacuación de más de cien residentes, según informaron hoy los medios locales.

En un primer momento se localizaron tres víctimas y unos 250 hombres, entre bomberos, miembros de protección civil y agentes de policía, trabajaron durante todo el domingo.

Esto, para encontrar los cuerpos del resto de desaparecidos, mientras se busca aún entre los escombros a dos personas.

Entre las últimas víctimas identificadas localizadas entre los escombros a primeras horas de la mañana está la enfermera de 30 años Selene Pagliarello, que se encontraba en el noveno mes de embarazo, Cerca de ella además se encontró el cuerpo de su esposo Giuseppe Carmina.

Las otras tres víctimas identificadas este domingo eran los vecinos del edificio Pietro Carmina, Enza Zagarro y Liliana Minacori.

Dos mujeres pudieron ser extraídas de los escombros y se encuentran hospitalizadas en la localidad de Licata y Agrigento con traumatismos y varias fracturas.

Explosión en Sicilia

Según las primeras hipótesis, se baraja la posibilidad de que se produjera una gran fuga de gas en la red de metano que causó una gran explosión.

Esto, además del hundimiento de tres casas en Sicilia y daños en otros edificios aledaños.

El comandante del cuerpo de bomberos de Agrigento, Giuseppe Merendino, destacó que seguramente “el gas se acumuló bajo tierra o en un ambiente cerrado y la activación de un ascensor pudo desencadenar la explosión”.

“En los próximos días realizaremos investigaciones más detalladas, este suceso es algo excepcional”, agregó.

No se descarta tampoco que la rotura de la tubería se haya podido deber al mal tiempo o a un deslizamiento de tierra.

La compañía Italgas informó en un comunicado que no había recibido ningún tipo de llamada de emergencia en los últimos días señalando fugas o olores a gas y expresó “su dolor y condolencias a la comunidad afectada por este dramático evento y, en particular, a las personas que han perdido a sus seres queridos”.