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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Los bomberos lograron controlar un incendio en la sede de la COP30 en Belém, Brasil, obligando a evacuar a todos los participantes. Las llamas se originaron en la Zona Azul de la ONU, gobernador de Pará y ministro de Turismo confirmaron que no hubo heridos. Aún se desconocen las causas y daños. La cumbre continuará como estaba programada.

Los bomberos controlaron el incendio desatado este jueves en el recinto donde tienen lugar las negociaciones de la cumbre climática de la ONU (COP30), en la ciudad de Belém, en Brasil, y que obligó a evacuar a todos los participantes, informaron fuentes oficiales.

Las llamas se desataron sobre las 14:30 hora local (misma hora de Chile) en un punto de la llamada Zona Azul, administrada por las Naciones Unidas y donde se encuentran las salas de reunión y los diversos pabellones de los países y organizaciones internacionales que participan en la cita.

El gobernador de Pará, Helder Barbalho, y el ministro de Turismo de Brasil, Celso Sabino, informaron a los periodistas que el incendio fue controlado en pocos minutos y que no hubo heridos.

El personal de seguridad aisló la zona del incendio y ordenó la evacuación de las decenas de personas presentes por las salidas de emergencia, lo que generó momentos de tensión, según pudo comprobar EFE.

Las causas y el origen del incendio aún son desconocidas, así como el alcance de los daños. No obstante, informaciones preliminares señalan que empezó en el pabellón de la India.

“Es algo que podría ocurrir en cualquier lugar del planeta. No hay posibilidad de cancelar la cumbre, que está siendo un éxito. La COP acabará mañana como está previsto”, dijo Sabino en declaraciones a los medios de comunicación.

La COP30 de Belém encaraba este jueves una penúltima jornada clave para destrabar las negociaciones sobre adaptación climática y una serie de hojas de ruta para abandonar los combustibles fósiles y acabar con la deforestación.

La ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, quien se encuentra en Belém participando de las negociaciones, confirmó que la delegación chilena pudo evacuar, detallando que están todos a salvo.

“Estábamos en una reunión con ministros para ver cómo estamos avanzando en las decisiones y hubo alerta de fuego así que tuvimos que evacuar. Estamos todos bien”, indicó.

“Nos avisaron que probablemente no seguirán las sesiones de negociación por hoy. La delegación de Chile está bien pero obviamente deja en incertidumbre respecto a cómo seguirán las negociaciones. Mañana debería terminar la COP30”, sostuvo.

Unas horas antes, el secretario general de la ONU, António Guterres, dio una rueda de prensa en esa Zona Azul en la que animó a los negociadores a llegar a un acuerdo “equilibrado”.

Los meses previos a la celebración de la cumbre estuvieron marcados por los graves problemas logísticos de Belém, puerta de entrada a la Amazonía brasileña, debido a la falta de infraestructuras de la ciudad y los altos precios del alojamiento.

Ya empezada la COP30, la ONU envió una carta a la Presidencia brasileña quejándose sobre algunos aspectos de infraestructura donde tienen lugar las negociaciones y pidió aumentar los efectivos de seguridad después de que una protesta de indígenas irrumpiera por la fuerza en el recinto.