Hernández, de 53 años, dijo hoy en una carta publica que es "inocente" y "víctima de una venganza y una conspiración. Estoy seguro que Dios me hará justicia".

El pleno de la Corte Suprema de Justicia de Honduras ratificó este lunes la extradición del expresidente Juan Orlando Hernández, a solicitud de Estados Unidos, que lo acusa de tres cargos asociados al narcotráfico y uso de armas de fuego.

El anuncio lo hizo el portavoz del Supremo, Melvin Duarte, quien indicó que por unanimidad de votos se concedió la “extradición”.

Hernández, de 53 años de edad, dijo hoy en una carta publica que es “inocente” y “víctima de una venganza y una conspiración. “Estoy seguro que Dios me hará justicia”, agregó.

La carta fue difundida antes de que el pleno de la Corte Suprema de Justicia se reúna hoy en la capital hondureña para decidir si ratifica, modifica o revoca la extradición del exgobernante que, el pasado día 16, autorizó un juez natural que conoció sobre el arresto preventivo con fines de extradición que solicitó EEUU el 14 de febrero.

“Es muy doloroso lo que estoy viviendo. Es muy duro estar separado de mi familia, mis seres queridos, privado de tantas cosas. Cuando pienso en mis nietas Violeta y Olivia se viene a mi mente la posibilidad de no verlas nunca más, que no podré entregar a mis menores hijas Daniela e Isabela cuando decidan casarse, que no podré ver Honduras y su gente”, señaló Hernández.

Justicia de Honduras confirma extradición de Hernández

La Justicia estadounidense acusa a Hernández de tres cargos.

El primero, por “conspiración para importar una sustancia controlada a los Estados Unidos”, con el “conocimiento de que dicha sustancia sería importada ilegalmente a los Estados Unidos” a aguas “a una distancia de 12 millas de la costa de los Estados Unidos”.

Además, se le acusa de “fabricar, distribuir y poseer con la intención de distribuir una sustancia controlada a bordo de una aeronave registrada en Estados Unidos”.

El segundo cargo, es por “usar o portar armas de fuego, o ayudar e instigar al uso, el poder y la posesión” de “ametralladoras y dispositivos destructivos”.

Las armas y los dispositivos destructivos serían “en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos de los que se le acusa en el cargo uno”.

El cargo tres se refiere a una “conspiración para usar o portar armas de fuego, incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos, durante y en relación con, o poseer armas de fuego, incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos, en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos”, según un informe que la Embajada estadounidense le envió a la Cancillería hondureña el 14 de febrero.