Delegaciones de Cuba y la Unión Europea (UE) abordaron este viernes en La Habana sus estrategias para enfrentar el recrudecimiento del embargo que Estados Unidos aplica contra la isla y que pone en riesgo las inversiones del bloque en este país del Caribe.

Se trata de la segunda ronda del diálogo sobre “medidas coercitivas unilaterales” entre ambos socios que dio continuidad al encuentro celebrado en noviembre de 2018 en Bruselas, en Bélgica.

Son “muy serios los efectos del bloqueo sobre la economía cubana y en la prestación de los servicios de salud, (un) efecto negativo sobre las relaciones económicas entre la UE y Cuba”, dijo la representante europea Katja Afheldt, al inicio de la cita, según imágenes de la televisión estatal.

“El efecto extraterritorial del embargo de Estados Unidos es ilegal y una violación de las reglas del comercio internacional (…). Expone a nuestros países y a sus legítimos intereses comerciales con Cuba”, agregó Afheldt, jefa de la División para México, Centroamérica y el Caribe del Servicio Europeo de Acción Exterior.

En abril pasado, el presidente Donald Trump puso en vigor el título III de la ley Helms-Burton (de 1996), suspendido por más de dos décadas, que permite a norteamericanos y cubanos emigrados demandar ante tribunales estadounidenses a las empresas extranjeras que gestionen bienes nacionalizados en Cuba en la década de 1960.

La UE es el principal inversionista extranjero en Cuba y ya algunas de sus empresas están involucradas en demandas en cortes federales estadounidenses.

El diálogo desarrollado en La Habana se celebró “en un clima respetuoso y constructivo”, según un comunicado publicado por la cancillería cubana, conversaciones que se llevan a cabo en virtud del Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación (ADPC) entre Cuba y la UE.

La parte cubana resaltó la existencia de una norma del Consejo Europeo “que protege a los Estados Miembros de la Unión Europea de los efectos extraterritoriales de la Ley Helms-Burton”, dijo el comunicado.

Según la cancillería cubana, Trump dictó más de 180 medidas para reforzar el bloqueo, acusando a Cuba de ser sostén de su aliado, el venezolano Nicolás Maduro.

“Se ha producido un recrudecimiento significativo de la aplicación del bloqueo y de medidas similares de naturaleza hostil contra Cuba”, dijo en la reunión Rodolfo Reyes, director de Asuntos Multilaterales de la cancillería cubana.

Cuba asegura que Estados Unidos ha activado una campaña para tensar al máximo las relaciones bilaterales y generar el cierre de embajadas, situación que dista mucho del histórico acercamiento que lograron Barack Obama y Raúl Castro en 2015.