Un día después de que Chile asegurara ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya que el río Silala, sobre el que tiene una disputa con Bolivia, fluía “naturalmente” sobre su territorio, Bolivia respondió que ese cauce era artificial.

“Las aguas de los manantiales del Silala fluyen artificialmente hacia el territorio chileno por las obras de canalización realizadas en el siglo pasado“, escribió este sábado el presidente Evo Morales en su cuenta de Twitter.

El conflicto entre ambos países se remonta a 2016, cuando el Gobierno de la entonces expresidenta Michelle Bachelet interpuso una demanda para exigir que se definiera al Silala como río internacional.

Bolivia presentó una contrademanda en 2018, argumentando que ese caudal nacía en su territorio y que cruzaba la frontera por un cauce artificial debido a las obras de canalización ejecutadas en el siglo XX.

“Nuestra contramemoria se fundamenta en estudios e investigaciones geológicas, geofísicas, hidráulicas, hidrológicas, hidroquímicas y medioambientales, que confirman que un caudal considerable de las aguas del Silala fluye artificialmente hacia el territorio chileno”, remarcó Morales.

El mandatario acusó a la prensa chilena de haber tergiversado declaraciones suyas de 2018 sobre un supuesto flujo natural de las aguas del Silala hacia Chile, lo que desde la perspectiva chilena se interpretó como un giro en la posición boliviana que fortaleció la argumentación de Santiago.

El canciller chileno, Roberto Ampuero, había sostenido el viernes que el Silala “fluye porque hay una pendiente considerable”, por lo que Chile tiene derecho al uso compartido de sus aguas.

Bolivia debe presentar la dúplica antes del próximo 15 de mayo. “Se está haciendo toda la argumentación jurídica, recogiendo información histórica y precisa relacionada con los manantiales del “Silala”, señaló el canciller boliviano Diego Pary.