En noviembre pasado, un grupo de padres de familia del Colegio Salesiano San José, de Santa Ana, al occidente de El Salvador, elevó su queja contra las autoridades de esta institución de estudios, tras descubrir un video de alto contenido sexual cuyo protagonista era el padre Melvin Pérez. El religioso envió el material erótico a un alumno menor de edad, de tercer año de bachillerato (4º medio en Chile) con quien, según testigos, tenía una “relación consentida”.
Tres meses han pasado desde entonces, pero las redes sociales y la denuncia que se vierte regularmente en esa vía ciudadana, surtió efecto en los últimos días. Varias cuentas desde el occidental departamento compartieron la información en la que se revelaba no solo el acto y el rostro del sacerdote docente, sino, la indignación por la falta de denuncia contra el religioso.
BioBioChile pudo corroborar la existencia del video en el que aparece el padre Pérez, desnudo, realizándose tocamientos en sus partes íntimas. Debido a lo explícito del material, este medio decidió no publicarlo junto a esta pieza periodística. Es un registro pornográfico en toda la extensión de la palabra, que el sacerdote mandó al joven con el que mantenía una relación. Luego, se hizo del dominio de los alumnos, hasta que llegó al conocimiento de un grupo de apoderados.
Una exapoderada habló desde la nación centroamericana con BioBioChile, prefiriendo el anonimato, para asegurar que las acusaciones contra el padre Pérez eran ciertas. Descubrieron que algo andaba mal porque 22 alumnos de la promoción 2018 quedaron repitiendo año. Los padres se organizaron, al punto de enterarse de un método nada agradable.
“Los papás se dieron cuenta que él chantajeaba a los alumnos”, al parecer les pedía material indebido y algo más, a cambio de buenas calificaciones.
Pero ni los padres del menor de edad para quien grabó el video, ni la institución educativa, remitieron el caso a instancias judiciales. “Eso quedó en manos del colegio. Cuando se dieron cuenta inmediatamente exiliaron al padre, lo sacaron del colegio, solo eso supimos nosotros. Eso quedó en manos del colegio”, asegura la exapoderada quien evidentemente teme ser reconocida.
Asegura que el sacerdote fue enviado a Guatemala a una congregación salesiana. “Tendrían que haberlo denunciado acá y que pagara por lo que hizo, aunque fuera que estuvieran de acuerdo los dos (en la supuesta relación con el joven) es un menor de edad. El podría hacerlo de nuevo contra otros menores”.
Comunicado del colegio San José
La presión de la opinión pública salvadoreña fue tal, que el Colegio San José emitió un comunicado en el que confirma la denuncia, la investigación interna y la destitución del acusado, previo a las preguntas hechas en el centro de estudios, es decir y citamos: “previo a los testimonios que nos ayudaron a esclarecer la veracidad de los hechos”.
Con lo anterior, el mismo colegio sostiene en su misiva, que hubo conducta inapropiada del padre Pérez y que denunciaron ante el MINED (Ministerio de Educación salvadoreño) y ante las autoridades eclesiásticas locales. También hacen referencia a que “se les suspendió para el ejercicio del ministerio sacerdotal”.
Sin embargo, no hubo un solo indicio que diera cuenta de un proceso en su contra. Es más, el periódico local La Prensa Gráfica, confirma en una publicación reciente, que el cura se encuentra fuera de El Salvador, especificamente en la vecina Guatemala y que desde ese país ha mostrado su disposición a enfrentar las leyes si fuera necesario.
BioBiochile se puso en contacto con la Fiscalía General de la República en territorio salvadoreño. A través de su cuenta de Twitter, confirmaron que “hay una investigación de oficio pero no existe registro de que el colegio o las víctimas hayan hecho una denuncia o interpuesto un aviso”.
El ministerio público dice que la investigación está en su etapa inicial, por lo que han solicitado los registros migratorios para saber si el padre Pérez salió en del país. Asímismo se llevarán a cabo entrevistas para comprobar la autenticidad del video. “No podemos afirmarlo, hasta que sea sometido a una experticia”, fue la respuesta de la institución a nuestra redacción.
En busca de más respuestas, hablamos con una trabajadora administrativa de la institución educativa. Dijo en una conversación telefónica vía Skype, que el comunicado era todo lo que el colegio iba a emitir como respuesta.
Desde esta redacción se insistió en varias ocasiones para saber más detalles del caso, entre estos, si era la apoderada legal del colegio. Lo negó, pese a que una secretaria nos comunicó con ella. Aseguró además, ante nuestra insistencia, que el director, el padre William Argüello, no se encontraba en ese mismo campus pero al pedirle una vez más un número telefónico para entrevistarle, no quiso proporcionarlo.
“Esta es la segunda vez que pasa”
Luego del comunicado del Colegio San José, el malestar fue creciendo con las horas. Algunos padres de familia reprochaban en los comentarios, seguido de la publicación, que no era la primera vez que un caso como este salpicaba a la institución. En efecto. En 2009, el padre Carlos Posada fue enviado a la justicia local, acusado de violación contra un estudiante de solo 9 años. El caso estaba pendiente de resolverse desde 2006.
La periodista salvadoreña, Francis López, confirmó a BioBioChile que en ese entonces, el colegio entró en una especie de reingeniera obligada. “La presión los obligó a plantearse una mejora en la educación para recuperar el prestigio”. Sin duda el delito cometido por el sacerdote Posada, impactó seriamente a la institución. Pero este no se entregó de inmediato a las autoridades cuando emitieron orden de captura en su contra.
Hubo una serie de citatorios a tribunales santanecos hasta que fue declarado reo rebelde y posteriormente capturado en un control vehicular de la capital San Salvador. Así lo consignaba, de hecho, el sitio chileno Emol, hace 10 años.
El entonces sacerdote fue puesto en prisión preventiva en el penal La Esperanza. Posada fue sentenciado en julio de 2009 a 26 años de prisión por el delito de violación y el caso que recién sale a la luz, trajo a memoria el doloroso proceso para un niño que en ese entonces cursaba su tercer año básico y que fue agredido en al menos dos ocasiones por el cura que afortunadamente fue condenado.
Desde la ciudad de los acontencimientos, el sacerdote Edwin Baños, de la Diócesis de Santa Ana y Director de Radio y Periódico Digital “Una Voz”, pidió perdón a nombre de la iglesia católica local, asegurando que se debe hacer justicia para los padres y alumnos, víctimas del padre Pérez en el Colegio San José.
En nombre de la Iglesia pido perdón y me uno al dolor de las familias víctimas por los abusos sexuales del P. Melvin Pérez hacia sus hijos. El Colegio San José, Santa Ana, debe hacer justicia y reparar daños.
— Padre Edwin Baños (@padreedwinbanos) 13 de febrero de 2019
