El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este sábado que pretende impulsar un decreto para “garantizar” la posesión de armas de fuego para quien no tenga antecedentes criminales.

“Por decreto pretendemos garantizar la posesión de arma de fuego para el ciudadano sin antecedentes criminales, así como hacer que su registro definitivo”, tuiteó el ultraderechista que asumirá el mandato el 1 de enero.

La posesión de armas de fuego en casa es permitida en Brasil siguiendo los requisitos establecidos por la ley, entre ellos, ser mayor de 25 años, no tener antecedentes criminales, no tener procesos criminales abiertos ni haber sido condenado, comprobar la capacidad técnica y psicológica para su uso, tener ocupación lícita y justificar la necesidad del arma.

La aprobación recae sobre la Policía Federal. Este procedimiento es válido apenas para la posesión del arma y no para el porte, que implica cargar el arma fuera del domicilio y que está reservado principalmente, por ejercicio profesional, a militares, policías y el ramo de seguridad, entre otros.

Bolsonaro, excapitán del Ejército, se mostró a favor de políticas armamentistas durante la campaña electoral, defendiendo que “ciudadanos de bien” tienen derecho a tener armas para defensa propia. Durante una entrevista incluso dijo que su casa, que ocupa un área de más de 200 metros cuadrados en Rio de Janeiro, nunca fue asaltada porque él estaba armado.

Brasil marcó un triste récord en 2016 con 62,5 mil homicidios (30,3/100.000 habitantes), según cifras del Atlas de la Violencia.

El equipo de investigadores responsable por este balance anual resaltó en junio que es necesaria una política de control responsable de armas de fuego.

Según el reporte, entre 1980 y 2016, 910.000 personas murieron por heridas de armas de fuego en Brasil.

Bolsonaro no ofreció más detalles sobre el eventual decreto, pero su hijo Eduardo Bolsonaro, minutos después, anunció también en Twitter que “muchas otras novedades aún están por venir”.

El tuit del presidente electo, que asumirá el martes el mando de manos del saliente Michel Temer bajo un amplio operativo de seguridad, obtuvo 22.000 “me gusta” en una hora y media, y más de 2.000 comentarios, la mayoría celebrando el anuncio.

Asunción

Con un sistema antimisiles, aviones de combate y un riguroso control terrestre, la ceremonia de investidura del presidente electo Jair Bolsonaro el próximo martes en Brasilia contará con un esquema de seguridad extremo, similar al del Mundial de 2014 y a los Juegos Olímpicos de Rio en 2016.

Aunque las autoridades evitaron revelar el número exacto de efectivos que serán desplegados ese día, al menos 3.000 uniformados resguardarán la zona de la Explanada y estarán cerradas las principales rutas de acceso a la misma.

Los periodistas acreditados para cubrir el evento solo podrán ingresar al área en buses oficiales y tendrán un punto asignado (Congreso, Presidencia, Cancillería o entre el público), sin derecho a desplazarse.