Al menos 32 civiles de la minoría peul murieron en el centro de Malí en un ataque atribuido a cazadores denominados “dozo”, indicó este domingo a la AFP la más importante asociación de esta minoría del país africano.

“Son los dozo (…) los que llegaron el sábado a la localidad de Koumaga, (región de Mopti, centro). Rodearon el pueblo, aislaron a los peuls de las demás comunidades y, fríamente, mataron al menos a 32 civiles. Otros diez han desaparecido”, declaró el presidente de la asociación Tabital Pulaaku, principal asociación peul en Malí, Abdul Aziz Diallo.

Por su parte, el Gobierno malí indicó en un comunicado que el ejército descubrió “16 cuerpos” tras un “choque violento” entre comunidades en Koumaga este sábado.

Por la noche, Abdul Aziz Diallo indicó que algunos cazadores “dozo” regresaron el domingo por la noche a la misma localidad, después de que se fuera el Ejército, dejando cuatro víctimas más.

Al ser consultada por estos últimos acontecimientos, una fuente del Ministerio de Defensa se limitó a declarar que “no confirmamos estas informaciones”.

Además, el presidente de Tabital Pulaaku anunció este domingo por la noche que diez peuls habían sido secuestrados durante el día en un pueblo vecino, Dorobugu, por hombres armados y también vestidos de cazadores tradicionales. Ninguna fuente independiente pudo confirmar esta información.

Los enfrentamientos son frecuentes desde hace tres años en el centro de Malí entre peuls, tradicionalmente ganaderos, y las etnias bambara y dogon, que se dedican esencialmente a la agricultura.

Los peuls denuncian regularmente ser objeto de violencia, en nombre de la lucha contra los yihadistas, por parte de grupos de cazadores tradicionales, tolerados o alentados -según ellos- por las autoridades y el Ejército. Estas acusaciones son desmentidas por el Gobierno.