El periodista sufrió el abuso sexual en 2020 y, dos años después, aseguró que "agoté todos los caminos legales".

Durante el fin de semana el periodista Simón Oliveros compartió con la alcaldesa Claudia Pizarro, el personal trainer Camilo Huerta y la cantante Karen Bejarano en La Divina Comida. Ahí, cada uno compartió diferentes vivencias mientras mostraron sus mejores dotes como anfitriones. Fue ahí que el comunicador habló de un indignante momento que vivió en un despacho en vivo.

Oliveros recordó entonces la vez que sufrió el acoso de una mujer mientras trabajaba. Entonces, se encontraba hablando con un grupo de mujeres en el matinal Mucho Gusto, cuando relató, visiblemente afectado, que una mujer metió dos de sus dedos en su parte trasera, situación que fue captada en vivo.

Este episodio se viralizó por la gravedad del momento, por lo que Oliveros decidió llevar el tema ante la justicia.

“A mí me pasó en vivo y en directo, me metieron el dedo en el poto. Fue una mujer”, comenzó diciendo en medio de la cena el periodista. En eso, Huerta también rememoró el momento, asegurando que entonces “acabó siendo un tema”.

Estaba en vivo y la señora me metió el dedo hasta adentro. Fue incómodo y molesto. Pedí la palabra y comenté la situación: ‘Me acaban de meter el dedo en el poto. Me parece una bajeza"”, relató el notero.

“Aunque esto no quedó ahí. Yo inicié acciones legales”, reveló. “Fui a Carabineros, la señora fue a amonestar… Lo que quisimos hacer nosotros como programa en ese momento, y personalmente, fue agotar todos los caminos legales que un hijo de cristiano pueda hacer en caso de que te pase eso”, comentó, añadiendo que su canal lo apoyó en todo momento.

Simón Oliveros y su agresión en vivo

El reprochable momento ocurrió en marzo de 2020. Entonces el periodista hablaba sobre los saqueos que afectaron a diferentes comunas cuando, de golpe, Oliveros relató la agresión captada en vivo.

“Las señora acaba de pasar detrás mío y me metió dos dedos en el poto. Dos veces”, indicó entonces. “Yo tengo una rabia tremenda en este momento. Lo que acaba de pasar ahora, en este momento, no puede seguir pasando en Chile”, aseveró.

Me siento absolutamente vulnerado. Nunca me había pasado una situación así. Nadie tiene el derecho a meterle el dedo en el culo a nadie (sic.), ni yo a una mujer ni una mujer a un hombre. Lo que acaba de pasar es sumamente grave”, cerró.