El pasado sábado 15 de febrero una triste noticia enlutó el mundo del espectáculo en Inglaterra, luego que se conociera el deceso de la renombrada presentadora de televisión Caroline Flack en su departamento en Londres.

Con el paso de los días, la familia de la comunicadora dieron a conocer que Flack se suicidó en el domicilio: se ahorcó con una prenda de vestir en la madrugada de aquel día.

“Pedimos que se respete la privacidad familiar durante este momento difícil”, indicaron en un comunicado.

La muerte de Flack llevó a casi 350.000 personas a firmar una petición, en redes sociales, para exigir leyes más estrictas contra los periódicos sensacionalistas y su forma en que tratan a las celebridades en sus ediciones.

Hay que señalar que Flack estaba pasando por varias complicaciones en el último tiempo. Sin ir más lejos, en los últimos meses había sido acusada de de agredir a su novio Lewis Burton.

Por este motivo se había visto forzada a dejar la animación de Love Island, el programa más visto en todo Reino Unido.

Cabe señalar que la comunicadora había sido detenida el pasado 14 de diciembre, aparentemente por haber golpeado a su pareja en un incidente. En ese momento, ella negó todos los cargos.

Pese a eso, la justicia había determinado una orden de alejamiento hacia Burton, además de la celebración de un juicio el próximo 4 de marzo.