La única medida que se conoce de Thalía Olvino es su altura: 1,78. Que sea 90-60-90 dejó de importar en el Miss Venezuela.

Esta joven de 19 años, estudiante de mercadeo, fue premiada este jueves en un certamen modesto, en el que por primera vez no se mencionaron tallas de las candidatas en un intento por celebrar una “belleza real”.

Olvino, representante del estado Delta Amacuro, vestirá en diciembre la banda de este país fábrica de reinas de belleza en el Miss Universo, que ya ganó en siete oportunidades.

FEDERICO PARRA / AFP
FEDERICO PARRA / AFP


“Esto lo hice con todo mi corazón y entrega”,
dijo la “soberana” al recibir la corona de Isabella Rodríguez, una joven de la empobrecida barriada caraqueña de Petare, que concursará en el Miss Mundo.

“Gracias a Dios, a mi familia. Los voy a llevar con todo el orgullo del mundo”, añadió.

Melissa Jiménez, candidata por el petrolero estado Zulia, representará a Venezuela en el Miss International.

En una apuesta por una “belleza diferenciada”, la organización había prometido un certamen con menos bisturí y dietas extremas, precisamente lo que caracterizó a la “fábrica de misses” por muchísimos años.

El Miss Venezuela estuvo involucrado el año pasado en un escándalo de supuesto proxenetismo y favores sexuales que vinculó a exmisses con millonarios cercanos al gobierno.

Federico Parra / AFP)
Federico Parra / AFP)

El incidente llevó a la renuncia de Osmel Sousa, conocido como el “zar de la belleza” y organizador del evento por cuatro décadas, que siempre negó cualquier relación con la práctica.

Sousa, ahora organizador del Miss Argentina y Miss Uruguay, era un abierto defensor de las dietas y cirugías para llegar a las “medidas perfectas” 90-60-90.