Al mediodía de este jueves el exbailarín Fabricio Vasconcellos fue formalizado por presunta estafa de terrenos. El brasileño llegó hasta el Juzgado de Garantía de San Bernardo (Santiago), lugar al que ingresó corriendo y empujando a la prensa, evitando dar declaraciones, según mostró el matinal La Mañana de Chilevisión.

El programa Intrusos de La Red incluso aseguró que el brasileño habría agredido a uno de sus periodistas con un “manotazo” propinado durante su apresurado ingreso.

Vaconcellos fue citado al lugar por una demanda que lo acusa de vender a 14 personas un terreno subdividido en lotes irregulares en la localidad de Paine en 2016.

Según los compradores, que pagaron 17 millones, habrían sido engañados sobre la calidad habitacional del terreno, que en realidad se emplazaba en una área rural de interés silvoagropecuario, innundables y no aptos para ser urbanizado.

Antes del ingreso, el brasileño solicitó que la prensa no ingresara con cámaras para grabar el proceso legal, bajo una solicitud llamada infidencia usada para proteger la honra, sin embargo los demandantes autorizaron el ingreso y las imágenes, contó Intrusos, aunque no su transmisión en vivo.

Según el mismo canal, la abogada del brasileño lo defendió asegurando que “una cosa muy distinta es estafar y otra es engañar”. La representante aseguró que las responsabilidades son del municipio local y que este tipo de irregularidades siempre han sido permitidas por la alcaldía.

De la misma forma, alegó que el caso “explotó” porque Fabricio es famoso pero que, sin embargo, él nunca usó su imagen para vender las tierras, ni tampoco otros elementos como letreros vistosos.

La Red además detalló que la defensora explicó que él contrató a gente para la venta, puesto que “no es un tema que ‘maneje” su representado. También culpó a los demandantes por no comprar un certificado “barato y accesible” en donde se estipulaban las características del terreno agrícola.

Finalmente, señaló que el más perjudicado en Vasconcellos porque tiene una deuda que supera los 600 millones de pesos.