El consumo excesivo de alcohol sólo le ha traído problemas al cantante Alejandro Fernández (47). Durante el año pasado dio al menos tres conciertos bajo los efectos de esta sustancia y fue visto en varias oportunidades en el mismo estado. Sin embargo, lo ocurrido a inicios de esta semana significó un escándalo aún más grande.

En esa oportunidad, el cantante no sólo subió borracho a un avión de la línea Aeroméxico, sino que además se encargó de armar un escándalo que dio problemas tanto a la tripulación y personal del avión, como también a los pasajeros que iban a bordo.

Tal como cuenta el portal de People en español, Fernández se negó a seguir las medidas de seguridad necesarias para viajar en avión, a pesar de la asistencia de las azafatas. “Cuando dieron la indicación de apagar los celulares y abrochar el cinturón, él no quiso hacer caso”, dijo una fuente al medio y aseguró que “estaba muy borracho”.

Pero esa no fue la peor parte. Fernádez luego se puso de pie y comenzó a sembrar temor entre los pasajeros al mostrar un video del accidente aéreo sucedido en Durango a fines de julio, en el que un avión se precipitó a tierra poco después de despegar desde el aeropuerto.

“(Alejandro) se levantó y nos empezó a mostrar el video del avionazo en Durango, y nos dijo que ojalá no nos pasara lo mismo; así que nos puso a todos nerviosos porque viajábamos en un avión de la misma aerolínea”, detalló la fuente.

A pesar de estar ebrio y con una actitud “altanera”, una azafata logró convencerlo de bajarse del avión, siendo expulsado del vuelo junto a una mujer que lo acompañaba.

Parte del momento fue grabado por uno de los pasajeros y divulgado por el Instagram de Despierta América, en donde además se observa el aspecto descuidado del cantante.

Algunas horas después del escándalo, Alejandro decidió rendir una explicación y pidió disculpas a través de Twitter por lo ocurrido. “Ofrezco una disculpa a la aerolínea y a los pasajeros de mi vuelo; tras un recorrido trasatlántico estaba extremadamente cansado. Nada justifica mis acciones. ¡Les deseo felicidad a todos!”, escribió.

Luego agregó en otro tuit: “Alguna vez escuché que equivocarse es un defecto de todos, pero pedir disculpas una virtud de pocos. Me duele que esto haya pasado, aunque estoy seguro, me llevará por el camino de ser una mejor persona”. En Instagram siguió con la misma dinámica “reflexiva”.

#Reflexión 🙏🏼

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Tanto las acciones del artista mexicano sobre el avión como sus disculpas preocuparon a sus seguidores, quienes le sugirieron que buscara ayuda para tratar su adicción al alcohol.