Hace más de una década millones de adolescentes cayeron en el frenesí de Crepúsculo, una saga de libros lanzada en 2005, que llegó a la pantalla grande en 2009.

Los libros y las películas de la historia d de una adolescente de 17 años que se enamoraba de un vampiro de más de un siglo de vida, recaudaron millones de dólares, lanzó la carrera de Robert Pattinson y Kristen Stewart, e impulsó las ventas de novelas juveniles. Pero mientras sumaba y sumaba fans en el mundo, también surgían importantes grupos de detractores que no comulgaban con algunas partes de la trama.

Muchos acusaban a los libros de Stephanie Meyer de romantizar relaciones tóxicas -no sólo de Bella y Edward, sino que de otros personajes-, lo que podría terminar afectando a la larga a los adolescentes. Más de 10 años después del fenómeno, dichas discusiones siguen presentes, especialmente ahora que la saga volvió a estar disponible en Netflix y sus películas estuvieron entre las más vistas en Chile, durante varios días.

Twilight

Pero vamos parte. Por supuesto que las principales críticas se las lleva Edward y Bella, y no sólo por los más de 80 años de diferencia de edad, sino porque su romance está lejos de ser saludable e incluso bordeaba peligrosamente lo abusivo.

Según el portal Wired, un usuario de redes sociales llamado kar3ning, encontró 15 ejemplos de comportamiento considerado como abusivo por la Línea Directa Nacional de Abuso Doméstico en la película Luna Nueva.

Entre otras cosas, el cibernauta habla de los celos excesivos y control que mantiene Edward sobre Bella, manifestando su molestia cada vez ve a Jacob, el mejor amigo de la joven; sin mencionar que le asegura que es capaz suicidarse si algo llegara a pasarle a ella.

Por otro lado, mantiene comportamientos arriesgados que suelen asustarla como conducir muy rápido o abandonarla en el bosque tras terminar la relación, un lugar donde él sabe pueden haber otros vampiros y diferentes peligros. Cómo no mencionar cuando la espiaba mientras dormía y la seguía dónde fuera, tras apenas haberse conocido.

Pero como decíamos,no sólo Edward presenta problemas en la historia. Bella también concurre en algunos momentos cuestionables, como el chantaje para hacer que su novio tenga relaciones sexuales con ella, en Eclipse. De hecho, le asegura que sólo se casara con él si acepta tener sexo con ella mientras siguiera siendo humana.

Twilight

Los signos más comunes de abuso doméstico

Según Línea Directa Nacional de Abuso Doméstico en EEUU, uno o dos de estos comportamientos en una relación es una señal de alerta.

– Mostrar celos extremos de tus amigos o pasar tiempo lejos de ellos.

– Impedirle o disuadirle de pasar tiempo con amigos, familiares o compañeros.

– Impedirle tomar sus propias decisiones, incluso sobre trabajar o asistir a la escuela.

– Controlar las finanzas del hogar sin discutirlo.

– Presionarte para tener relaciones sexuales o realizar actos sexuales con los que no te sientes cómodo.

– Intimidarlo con miradas o acciones amenazadoras,

¿Suena familiar Edward y Bella?

¿Qué dice la psicología?

“Si bien algunas historias de vampiros son ricas en lecciones sexuales y culturales, la saga de Crepúsculo, en mi opinión, puede usarse como una muestra de comportamientos que ponen a las personas en riesgo de abuso en las relaciones de pareja”, aseguró a Psychology Today Wind Goodfriend, doctora en psicología y profesora en la Universidad de Buena Vista.

Según la especialista, la popularidad de la saga se basa en que para muchos Edward representa un alma atribulada que espera ser domesticada por la mujer adecuada. “Desafortunadamente, el curso y las características de la relación de Bella con Edward son en realidad modelos para la violencia y el abuso, y los fanáticos de Crepúsculo pueden modelar sin saberlo una relación que está lejos de ser saludable. Si bien la violencia en las relaciones es extremadamente complicada y cada caso es diferente, los investigadores han identificado algunas señales de advertencia”, agregó.

Volviendo a Bella, el personaje muestra algunas señales comunes en víctimas de relaciones violentas como baja autoestima, ella suele describirse como antisocial, poco atractiva y torpe. Por lo mismo, cuando Edward se interesa en ella, la joven lo pone en una posición de poder, porque cree que ella no está a su altura.

Bella también vive algo conocido como el Efecto de Romeo y Julieta, donde alguien se siente atraído por una persona que de alguna forma le está prohibida y que le es peligrosa. Más allá que Edward sea mayor que ella y un vampiro, el interés de Bella por Jacob aumenta cuando este le dice que no quiere verla más porque no quiere hacerle daño.

En tanto Edward, por más que brille al sol, esconde elementos clásicos de los abusadores. “Primero, una de sus características distintivas es su control sobre Bella y sus intentos de aislarla de los demás. Los abusadores a menudo usan esta táctica como una forma de asegurarse de que sus víctimas no tengan forma de escapar si intentan hacerlo”, comentó Goodfriend.

También usa la coacción para acelerar la cercanía. “Si un abusador puede conseguir el compromiso total de su víctima lo antes posible, esto básicamente ‘encierra’ a la víctima y le impide escapar”, explicó.

Cuando empiezan su relación, pasan todo el tiempo juntos y él la vigila todo el tiempo “para mantenerla segura”. Incluso le pide matrimonio sabiendo que ella es muy joven e inmadura para ello.

Bella y Edward no eran los únicos

Jacob, el mejor amigo de Bella tampoco está libre de culpas, pues además de besarla a la fuerza, mantiene una conversación con Edward para obligarla a abortar a su hija, sin respetar la decisión de seguir adelante con su embarazo, a pesar de poner en riesgo su vida.

En el mundo de los hombres lobos, Sam y Leah Clearwater fueron otro ejemplo de relación poco saludable expuesta en el libro.

Antes de convertirse, Sam mantuvo una relación con ella por tres años, donde los malos tratos estaba presentes, pero Leah seguía profundamente enamorada de él.

Un día, sin explicación, el hombre desapareció por dos semanas y cuando volvió no le dirigió la palabra ni tampoco le dijo qué había pasado con él. Leah, en tanto, decidió darle espacio.

Las cosas se volvieron más tensas cuando Emily, una prima de Leah, los visita y Sam se “imprima” con ella, es decir, siente una atracción involuntaria e inquebrantable hacía ella. Ese mismo día termina su relación con Leah, sin mayores vueltas, quien claramente no tomó bien la noticia.

El hombre además no tiene problemas en mostrar su felicidad con Emily frente a Leah.

New Moon

En la secundaria de Forks también conocimos otra pareja poco sana. Hablamos de Mike Newton y Jessica Stanley. Y es que a pesar que ella estaba interesada en él y trataba de llamar su atención, él prefería a Bella, quien por supuesto no lo consideraba porque estaba obsesionada con Edward.

Sólo cuando Bella lo rechaza y le dice que Jessica estaba interesada en él, Mike decide invitarla al baile, quien acepta a pesar de saber que es la segunda opción, dejando claro la inseguridad de ambos personajes.

Pero no todas las relaciones son malas en la saga, ya que hay algunas rescatables como las de Rosalie y Emmet; Jasper y Alice; y Esme y Carlile.