Este martes se conoció que la reina Isabel II del Reino Unido sostuvo un almuerzo privado con su nieto el príncipe Harry la tarde del domingo.

En la instancia, una fuente de la casa real reveló que la monarca le entregó su apoyo tras su decisión de dejar la primera fila de la familia y que le afirmó que tanto él como su esposa Meghan son bienvenidos de volver a la firma.

No obstante, la jefa de Estado le aclaró que el acuerdo que los liberará de sus roles solo funcionará si ambos no explotan sus lazos con la monarquía ahora que quieren ser independientes económicamente.

Aquello levanta sospechas en medio de los rumores que circundan a la ex estrella de la serie Suits, sobre quien se ha dicho que su agente habría tenido acercamientos para conseguirle un papel en alguna película de Marvel.

A lo anterior se suma su posible participación en la MET Gala, evento a realizarse en Nueva York el 4 de mayo, evento al cual la duquesa asistiría en compañía de Edward Enninful, el editor de la versión británica de la revista Vogue.

La cita y su contenido fueron confirmados esta jornada por el periódico The Sun, replicados por Daily Mail y confirmados por la revista estadounidense People.

La fuente, que pidió anonimato, también señaló que esta fue la primera oportunidad que ambas figuras tuvieron para poder hablar cara a cara en solitario tras las reuniones llevadas a cabo entre enero y principios de febrero, conversaciones que sellaron el “Megxit”, salida que se concretará este 1 de abril.

Además, la soberana pudo conocer en detalle cuáles son los planes que tiene la pareja a futuro. “Fue un ambiente mucho más relajado y ambos pudieron decir lo que pensaban”, señaló la fuente.

“(La reina) Le dejó en claro que él y Meghan pueden volver si cambian de parecer y que los recibirá con los brazos abiertos, pero ella quería asegurarse que Harry sabía que hay límites y que el acuerdo está sujeto a revisión después de 12 meses”, reafirmó.

El duque de Sussex lleva una semana de vuelta en su país natal y se espera que Meghan llegue al Reino Unido el jueves para lo que será su última participación con la familia real: el servicio de acción de gracias por el día de la Mancomunidad de las Naciones, el lunes 9 de marzo en la Abadía de Westminster.

No obstante, Archie, su hijo de nueve meses, no viajaría con su madre y se quedaría en Vancouver, Canadá, ciudad en la cual la pareja decidió radicarse a fines de 2019, meses antes de dar a conocer al mundo sus intenciones.

El bebé también fue tema de conversación durante el almuerzo entre la abuela y su nieto, ya que la reina le habría hecho ver que le apena no poder estar cerca de su octavo bisnieto.