Meghan Markle y el príncipe Harry visitaron Irlanda esta semana, en su primer viaje oficial al extranjero como marido y mujer.
En su estadía, la pareja asistió a diferentes eventos y se reunió con varias figuras de la política local, una de ellas la senadora Catherine Noone.
La exactriz y Noone se conocieron en la cena que ofreció el embajador británico en Irlanda, donde pudieron intercambiar algunas palabras.
Noone usó su cuenta de Twitter para revelar parte de esa conversación con la duquesa de Sussex, quien se habría mostrado complacida con los resultados del referendum que despenalizó el aborto en Irlanda, el pasado 25 de mayo.
“La duquesa y yo charlamos sobre el resultado del reciente referendum, ella se mostró interesada y satisfecha por esto”, escribió, poniendo en aprietos a Markle, pues la realeza tiene prohibir manifestarse políticamente.
El mensaje provocó una gran conmoción, pues mientras algunos criticaron a Meghan por romper el protocolo y la imparcialidad que deben tener todos los miembros de la familia real, otros apuntaron a la indiscreción de Noone.
Debido al escándalo, la Senadora decidió eliminar el post y republicarlo con un mensaje menos polémico. “Un placer conocer al príncipe Harry y a la duquesa de Sussex en la residencia del Embajador Británico esta tarde”, escribió junto a una foto junto a la pareja.
A pleasure to meet Prince Harry & the Duchess of Sussex at the British Ambassador's Residence this evening. #harryandmeghan #royalcouple #meghanmarkle pic.twitter.com/yp2XHFh4MJ
— Sen Catherine Noone (@senatornoone) 10 de julio de 2018
Pero el daño ya estaba hecho, y varios tuiteros cuestionaron a la senadora por su mensaje, quien tuvo que aclararlo. “Fue una charla muy benigna, ella no expresó ninguna opinión política. Ella fue interesante y encantadora”, respondió a uno de sus seguidores.
I clarified – it was a very benign chat, she expressed no political opinion. She was interested and charming.
— Sen Catherine Noone (@senatornoone) 10 de julio de 2018
Esta, sin embargo, no ha sido la única oportunidad en que la duquesa ha roto el protocolo. La primera vez fue al anunciar su compromiso con Harry, ocasión en la que no llevó medias como dictan las normas para las mujeres reales.
Hace algunas semanas, mientras realizaba una visita oficial con la reina Isabel II, usó un vestido que dejaba al descubierto sus hombros, lo que tampoco está permitido.
En otra oportunidad, en una foto oficial con la Reina, se sentó con las piernas cruzadas, lo que también está absolutamente prohibido.
Finalmente, pocas semanas atrás cometió otro imperdonable error al darle la espalda a la monarca mientras hablaban, algo que nadie -ni siquiera su familia- tiene permitido hacer.
