La china Shein optó por Brasil para instalar sus primeras fábricas en el continente. Además, se asoció con Forever 21, por lo que venderá productos de esa marca a través de sus plataformas online.

El gigante chino de la moda, Shein, cerró un acuerdo con un fabricante local de Brasil y desde julio que ya produce en ese país, con lo que proyecta reducir los tiempos de sus envíos a nivel regional. Y en paralelo, la firma anunció una asociación con Forever 21.

En ese país prevé abrir más de 2.000 fábricas en los próximos cinco años.

Así lo confirmó el presidente de Shein para América Latina, Marcelo Claure. Otro objetivo de la firma es la creación de hasta 100.000 empleos en Brasil, destacó EuropaPress.

“Creemos en Brasil y estamos de acuerdo con el gobierno (quien celebró la llegada de Shein). Es hora de revitalizar la industria de fabricación textil”, expresó el responsable.

En concreto, la primera línea de producción de Shein en Brasil tuvo lugar en una fábrica de la Compañía de Tejidos Norte de Minas (Coteminas) en el Estado de Río Grande do Norte.

Asociación con Forever 21

De acuerdo a información difundida por la Agencia EFE, Shein y el grupo estadounidense SPARC, propietario de Forever 21 y otras tiendas de ropa, anunciaron que se asociaron para ampliar su alcance en el mercado minorista de Estados Unidos e Internet.

La “alianza estratégica” implica que Shein comprará un tercio de SPARC Group, mientras que este conglomerado se convertirá en socio minoritario de Shein.

La asociación supone que Shein distribuirá productos de Forever 21 en su plataforma de comercio electrónico, que tiene 150 millones de usuarios, y también habilitará puntos de venta y devolución en establecimientos físicos de Forever 21 en EEUU.

La Agencia EFE indicó que Shein tiene una gran acogida entre las generaciones más jóvenes, pero también es criticada por su modelo de negocio de “moda rápida” y consumismo, basado en producir industrialmente un gran volumen de prendas, con mucha rotación y a precios muy bajos, lo que genera un fuerte impacto ambiental.

Forever 21, una de las principales minoristas de moda rápida de EEUU, se convirtió en “víctima” de este competitivo sector que ha crecido con fuerza en el mercado digital en los últimos años; y tuvo que acogerse a un proceso de bancarrota en 2019.