El proceso de reestructuración que comenzó en noviembre pasado contó con el apoyo de más del 98% de los acreedores. La compañía deberá esperar 10 días para saber si cuenta con el financiamiento de mediano y largo plazo que podría ser proporcionado por los actuales acreedores financieros para cerrar exitosamente el proceso.

“Hace casi cuatro meses tomamos una decisión difícil, pero necesaria. Sabíamos que la mejor decisión de negocio para poder ordenarnos, seguir funcionando y proyectar la compañía por muchos años más era la reorganización, proceso que hace pocos minutos celebró su Junta de Acreedores donde nos aprobaron el plan de reorganización con amplio respaldo”, dijo Ricardo Margulis, gerente general de Valle Nevado.

“Es un gran paso para la empresa, sin embargo, debemos esperar concretar el compromiso de financiamiento de mediano y largo plazo que debiese conocerse dentro de los próximos días para decir que cerramos la reorganización con éxito” agregó el ejecutivo.

El acuerdo de reorganización explica que la empresa necesita cerca de UF228.000 para financiar su operación de mediano y corto plazo. De este monto, la familia Senerman –que ya inyectó recursos por UF65.000– aportará UF78.000 adicionales. Las restantes UF150.000 podrán serán financiadas por los actuales acreedores financieros, quienes tendrán prioridad en sus condiciones de pago de ser aportantes y deberán manifestar su intención de participar dentro de 10 días corridos siguientes a la junta de hoy 12 de abril.

Margulis destacó que trabajaron intensamente estos meses, “nuestros colaboradores hicieron un esfuerzo muy grande, los acreedores y proveedores siempre colaboraron por sacar adelante este proceso, ya que reconocen el valor de Valle Nevado para la industria, y los accionistas –liderados por la familia Senerman que inyectó importantes recursos– demostraron un liderazgo y compromiso enorme con el futuro del negocio”.

Por último, el ejecutivo explicó que van a trabajar durante toda la vigencia del acuerdo con un interventor, que junto a una comisión de acreedores compuesta por cinco miembros, velarán por el cumplimiento de todos los compromisos adquiridos. “Esto nos obliga a ser capaces de operar –con una política de “cinturón apretado” con máxima eficiencia en cada área de la operación en términos presupuestarios, pero manteniendo la calidad y el sello que nos ha llevado a ser el destino de nieve más importante de Chile y el hemisferio sur, donde además tenemos un desafío adicional, cumplir con las restricciones sanitarias para garantizar la seguridad de los visitantes”.