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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Chile cerró los primeros nueve meses del año con un balance comercial positivo, según la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales. El intercambio comercial creció un 7,8%, alcanzando US$145.660 millones. Las exportaciones sumaron US$76.959 millones, destacándose la minería, frutas frescas y alimentos. Las importaciones llegaron a US$68.701 millones. Las exportaciones de la industria alimentaria alcanzaron US$10.180 millones, con productos orgánicos vendiendo US$330 millones. La industria forestal registró una baja del 4,3%. Las exportaciones no tradicionales reflejaron envíos por US$34.678 millones. Los servicios al exterior ascendieron a US$2.317 millones.

En un entorno global caracterizado por las tensiones comerciales, Chile cerró los primeros nueve meses del año con cifras positivas en su balance comercial.

Según la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei), citando datos del Banco Central y Aduanas, el intercambio comercial entre enero y septiembre creció 7,8% frente al mismo período de 2024, totalizando US$145.660 millones.

Durante esos meses, se observaron envíos récord por parte de la minería, industria frutícola, los alimentos y servicios. Las exportaciones totalizaron US$76.959 millones (4,7% más), siendo el mayor monto exportado para ese período de lo que se tiene registro.

Las importaciones, por su parte, alcanzaron US$68.701 millones (11,4%).

Intercambio comercial de Chile

Las exportaciones anotaron cifras récord en cuanto a envíos tradicionales y no tradicionales.

Por parte de la minería, que representó más de la mitad de las exportaciones de bienes, se registraron ventas por US$44.059 millones (5,9%), un máximo histórico. Los concentrados de cobre y el carbonato de litio anotaron US$25.362 millones y US$1.326 millones cada uno.

En cuanto a las frutas frescas, los embarques crecieron 1,8% hasta los US$ 6.608 millones. La Subrei señaló aumentos en “paltas, manzanas, ciruelas, kiwis, peras, limones, cranberries, nectarines, zarzaparrillas, granadas, clementinas, frambuesas y frutillas”. Los frutos secos totalizaron US$643 millones, un 36% más.

Por el lado de la industria alimentaria, las operaciones anotaron US$10.180 millones (7,7%), con destacada participación de la industria marina -como los salmones y jureles-, arándanos congelados, carne de ave congelada, entre otros productos y conservas. Los productos orgánicos vendieron US$330 millones (20,5% más).

Baja en los vinos e industria forestal

El sector de los vinos, sin embargo, se ha visto golpeado con una caída de 3,6% hasta los US$1.155 millones, por la baja en vinos a granel y embotellados.

Con todo, desde la Subrei resaltaron “alzas en variedades embotelladas como Sauvignon Blanc, rosados, Chardonnay, espumantes, Pinot Blanc, Riesling y Viognier”.

La industria forestal cerró los nueve primeros meses del año con US$4.450 millones (-4,3%), debido a menores envíos de celulosa y madera cerrada, aunque se registraron alzas de productos más terminados como madera contrachapada, puertas o construcciones prefabricadas.

En el caso de las exportaciones no tradicionales, se reflejaron envíos por US$34.678 millones (6,1%), con alzas destacadas en el oro, molibdeno, avellanas, salmónidos, yodo, metanol, sulfato de litio, nueces, jurel congelado, filetes de jibia congelados, paltas Hass frescas, pechuga de ave congelada, arándanos congelados, limones frescos, entre otros.

Y en cuanto a los servicios, las prestaciones al exterior alcanzaron US$2.317 millones, un alza récord de 15%, la mayor para ese registro en específico. De los 193 tipos de servicios, 104 registraron alzas, destacando asesorías de marketing, soporte logístico, promoción y oferta de paquetes turísticas y otros.

La subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Claudia Sanhueza, resaltó que “estos positivos resultados, que han sido tendencia en los últimos meses, nos motivan a seguir profundizando la diversificación de mercados y la sofisticación de nuestra oferta exportadora”.

“En un contexto global desafiante, hoy más que nunca el trabajo mancomunado entre el sector público y privado sigue siendo el motor para que el país mantenga esta ruta de crecimiento sostenido”, concluyó.