El Banco, en paralelo, aumentó su previsión de crecimiento global hasta el 2,1% en 2023, cuatro décimas más que sus anteriores estimaciones, mientras que redujo en tres décimas sus perspectivas de crecimiento para 2024, hasta el 2,4%.

El Banco Mundial nuevamente reiteró su pronóstico sobre Chile: este año la economía se contraerá y la recuperación llegará durante 2024.

De acuerdo al organismo, la recesión proyectada para 2023 es resultado de los “efectos de arrastre de tres trimestres de crecimiento negativo en 2022”.

Eso último lo atribuyó a la “retirada de importantes estímulos monetarios, fiscales y cuasifiscales”.

En esta actualización del Banco Mundial, la contracción de Chile para este año sería de 0,4%; y el crecimiento en 2024 sería de 1,8% y de 2,2% en 2025.

Cabe recordar que el 5 de abril el Banco Central de Chile publicó el primer Informe de Política Monetaria (IPoM) del año 2023.

Según ese pronóstico, el rango de crecimiento para el país se corrigió al alza, hasta -0,5 y +0,5% (entre -1,75 y -0,75% en diciembre).

“Eso responde principalmente a la menor velocidad de ajuste del consumo a fines de 2022 y las sorpresas al alza de inicios de 2023. Para 2024, el rango de crecimiento se reduce en una magnitud equivalente, entre 1 y 2% (entre 2 y 3% en diciembre). Para 2025, se proyecta que la economía crecerá entre 2 y 3%”, indicó el IPoM.

Crecimiento global

El Banco, en paralelo, aumentó su previsión de crecimiento global hasta el 2,1% en 2023, cuatro décimas más que sus anteriores estimaciones, mientras que redujo en tres décimas sus perspectivas de crecimiento para 2024, hasta el 2,4%.

El organismo advirtió, sin embargo, de la vulnerabilidad de las economías en desarrollo por los efectos de las subidas de tipos para combatir la inflación.

La economía mundial, señaló, permanece en “un estado precario” en medio de los efectos prolongados de la pandemia, la guerra de Ucrania y el fuerte endurecimiento de la política monetaria para contener la alta inflación.

En su nuevo informe de perspectivas globales, dejó claro que la resiliencia que mostraron la mayoría de países a lo largo de 2022, cuando la economía global creció un 3,1% pese a la crisis energética y la guerra en Ucrania, se desvanecerá.