La Cámara de Diputados aprobó con modificaciones el proyecto de ley sobre fraudes bancarios, el cual ahora deberá volver al Senado para su tercer y último trámite.

En la nueva versión las víctimas deben denunciar “de inmediato” tras ser notificadas de los movimientos sospechosos en sus cuentas. Con la nueva ley, los usuarios no tendrían que pagar un seguro antifraudes, sino que los bancos deberán restituir los fondos reclamados como robados por el cliente en menos de 7 días y bloquear la tarjeta o medio de pago vulnerado.

Si tras indagar la situación el banco considerara que no existió fraude realmente, puede acudir a Tribunales pero manteniendo el dinero en la cuenta del usuario hasta recibir el fallo de la Justicia.

El ministro de Economía, José Ramón Valente, valoró la aprobación del proyecto afirmando que “nos estamos haciendo cargo de un vacío que dejaba desprotegidos a los usuarios cuando son víctimas de un fraude, sin normas claras y sin obligaciones para los bancos. Hoy van a estar más protegidos y los emisores no podrán desentenderse de sus responsabilidades”.

“El gobierno del presidente Sebastián Piñera está empeñado en que se balancee la relación entre los proveedores y los consumidores”, aseguró.