Tras años de esfuerzo, científicos de Colorado Boulder han logrado sintetizar una nueva forma del carbono llamada grafino, que fue largamente teorizado como material maravilloso de próxima generación.

El grafino ha sido durante mucho tiempo de interés para los científicos debido a sus similitudes con el grafeno, otra forma de carbono que es muy valorada por la industria. Su investigación incluso fue galardonada con el Premio Nobel de Física en 2010.

Sin embargo, a pesar de décadas de trabajo y teoría, solo se habían creado unos pocos fragmentos a la fecha. Esta investigación, anunciada en Nature Synthesis, llena un viejo vacío en la ciencia del carbono

El descubrimiento genera nuevas posibilidades para la investigación de materiales semiconductores, electrónicos y ópticos.

“Toda la audiencia, todo el campo, está realmente entusiasmado de que este antiguo problema, o este material imaginario, finalmente se haga realidad”, dijo en un comunicado Yiming Hu, autor principal del artículo y doctorado en química en 2022.

Nuevas formas de carbono

Los científicos estuvieron interesados durante mucho tiempo en la construcción de alótropos de carbono nuevos y novedosos. Incluso en formas de carbono, debido a la utilidad y versatilidad del carbono para la industria.

Hay diferentes maneras en que se pueden construir alótropos de carbono según cómo se utilicen los carbonos hibridados sp2, sp3 y sp (o las diferentes formas en que los átomos de carbono pueden unirse a otros elementos) y sus enlaces correspondientes.

Los alótropos de carbono más conocidos son el grafito (utilizado en herramientas como lápices y baterías). Y los diamantes, que se crean a partir de carbono sp2 y carbono sp3, respectivamente.

Para ello se usan métodos químicos tradicionales y los científicos crearon con éxito varios alótropos a lo largo de los años. Incluido el fullereno (cuyo descubrimiento ganó el Premio Nobel de Química en 1996) y el grafeno.

Sin embargo, estos métodos no permiten que los diferentes tipos de carbono se sinteticen juntos en ningún tipo de gran capacidad. A diferencia del grafeno, que había dejado el material teorizado, –que se especula que tiene propiedades ópticas, mecánicas y conductoras de electrones únicas– quedarse en eso: una teoría.

Pero también fue esa necesidad de lo no tradicional lo que llevó a aquellos en el campo a acercarse al grupo de laboratorio de Wei Zhang.

Zhang, profesor de química en CU Boulder, estudia química reversible, que es la química que permite que los enlaces se autocorrijan. Esto logra la creación de nuevas estructuras ordenadas, o redes, como polímeros sintéticos similares al ADN. Después de ser contactado, Zhang y su grupo de laboratorio decidieron intentarlo.

El grafino rivaliza con la conductividad del grafeno

El proceso se llevó a cabo usando un método llamado metátesis de alquinos. Los alquinos son un tipo de hidrocarburo con al menos un enlace covalente triple carbono-carbono

Este método provoca una reacción orgánica que implica la redistribución, corte y/o reforma, de enlaces químicos de alquinos. Además de termodinámica y control cinético.

Gracias a ello, el grupo pudo crear con éxito lo que nunca antes se había creado: un material que podía rivalizar con la conductividad del grafeno, pero con control.

“Hay una diferencia bastante grande (entre el grafeno y el grafino), pero en el buen sentido”, dijo Zhang. “Este podría ser el material maravilloso de próxima generación. Es por eso que la gente está muy emocionada”.

Si bien el material se creó con éxito, el equipo aún quiere analizar los detalles particulares del mismo. Incluida la forma de crear el material a gran escala y cómo se puede manipular.

“Realmente estamos tratando de explorar este material novedoso desde múltiples dimensiones, tanto experimental como teóricamente. Desde el nivel atómico hasta los dispositivos reales”, dijo Zhang sobre los próximos pasos.

Estos esfuerzos, a su vez, deberían ayudar a descubrir cómo las propiedades ópticas y conductoras de electrones del material pueden usarse para aplicaciones industriales como las baterías de iones de litio.