Tras dos años de litigio, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid dictaminó que Miguel Bosé defraudó al Estado español en sus declaraciones de impuestos de los años 2010 y 2011.
El veredicto se promulga luego que el cantante entablara un recurso en la justicia para revertir su primer fallo, donde se le acusaba de utilizar sus empresas para pagar sólo parcialmente el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Tal como recuerda el matutino español ABC, fue en ese 2019 cuando Bosé salió de la lista de morosos tras abonar parte de su deuda tras bullados problemas económicos.
“(Bosé) cobró de una sociedad de la que era «administrador único» por servicios que hubiera tenido que declarar como ingresos en el IRPF y que no estaban ajustadas a precios de mercado”, detalla el matutino hispano.
“Y además, la sentencia también da la razón al fisco al considerar que el artista trató de desgravarse gastos personales declarados por su empresa, como la compra de jamones de bellota o la contratación del servicio doméstico o su entrenador personal, que no eran deducibles”, agrega la misma publicación.
El dictamen ha generado múltiples suspicacias en la prensa ibérica, donde se especula que esta sería la razón detrás de la decisión del cantante de cancelar sus shows en España este año.
Sus fechas en Valencia y Marbella ya fueron desechadas, mientras que su recital en Barcelona, que aún no tenía día, estaría en vísperas de ser suspendida.
Aquella, sin embargo, no es la única teoría al respecto: los problemas de salud que ha reconocido y evidenciado Bosé en las últimas semanas (relacionados en específico a su voz) también son motivo de preocupación entre sus fans.
