Casi tres meses antes de dejar el municipio de Ñuñoa por un cáncer a la tiroides que fue detectado en 2014, el ex alcalde Pedro Sabat armó un negocio millonario del cual podría obtener cerca de $1.700 millones en junio de este año.

Según informó The Clinic, son dos las propiedades del ex jefe comunal ubicadas en la calle Pedro de Valdivia. Una tiene un avaluó fiscal de $200 millones y la otra por $89 millones, por las cuales hizo un contrato de compraventa con la inmobiliaria Fernández Wood. Sin embargo, la polémica se generó cuando se supo que el municipio aprobó el anteproyecto de edificación en el lugar.

Alejandra Placencia, concejal independiente, afirmó que esto comprueba las sospechas de que Sabat no tuvo voluntad política para cambiar el plan regulador de la comuna, porque tiene intereses creados con inmobiliarias.

El concejal DC, Jaime Castillo, lamentó que nuevamente la comuna este involucrada en temas irregulares, más aún el ex alcalde, quien a su juicio no debió incursionar en temas inmobiliarios mientras ejercía su cargo, porque la aprobación del anteproyecto de edificación, si bien aparece firmado por un tercero, fue él quién lo decidió.

El diputado RN, José Luis Rosasco, defendió al ex alcalde Sabat y argumentó que pudo comprar o vendar cualquier propiedad mientras fue alcalde y aseguró que no cometió ninguna falta o delito.

Paralelamente continúa la investigación por el denominado Caso Basura, que también involucra al ex alcalde Pedro Sabat, quien fue denunciado por fraude al fisco, enriquecimiento ilícito y negociación incompatible por la adjudicación de la licitación de la basura con la empresa KDM Demarco en el año 2012.