Los ninjas son por excelencia un ícono en la cultura asiática y Japón quiere aprovechar ese atractivo y explotarlo. Así es como ha comenzado la búsqueda de estos guerreros silenciosos, a quienes ofrece trabajo.

Es la prefectura de Aichi la que ofrece el trabajo, con requisitos de ser personas con aptitud física y habilidades acrobáticas para promover “el turismo del señor de la guerra”, informa BBC.

Los postulantes, que deberán “disfrutar de ser el centro de atención”, recibirán una paga de 180.000 yenes, poco más de 1 millón de pesos chilenos.

Como parte del trabajo –además de mostrar acrobacias y manejo del shuriken– deberán hablar inglés y ser promotores de la zona, haciendo relaciones públicas con los medios de comunicación.

Son seis los cupos para personas mayores de 18 años, quienes no necesariamente deben tener experiencia previa en combate como ninja ni mucho menos haber matado a otras persona, cosa que de hecho, podría ser un obstáculo para los postulantes.

Se estima que Aichi busca replicar el éxito conseguido por la prefectura vecina Mie, que cuenta con un museo ninja con datos históricos y acrobacias inspiradas en los antiguos guerreros.

Iga, la ciudad que alberga este museo, se proclama como el origen de los ninjas en Japón.

Del siglo XV, los ninja eran mercenarios especializados en espionaje, asesinato, sabotaje y diversas formas de combate. Se estima que desaparecieron en torno al siglo XVII, con la unificación de Japón.