Imagínate la siguiente situación. Estas durmiendo, quizás plácidamente. Pero en un repentino momento despiertas. No ves nada, está todo oscuro, no hay luz. Tratas de levantarte pero chocas con algo, que no es el techo de tu casa precisamente. Luego de unos minutos de desesperante confusión, te das cuenta de que el miedo que te estaba invadiendo, poco a poco comienza a transformarse en realidad: estás enterrado vivo.
¿Qué harías en esta situación? Probablemente gritarías, arañarías el ataúd, o quizás te des cabezazos producto de la desesperación. Pero no te esfuerces demasiado, porque en los siguientes casos la mayoría de las personas a las que le ocurrió esto hicieron exactamente lo mismo que tú harías.
¿Les sirvió para sobrevivir? Revísalo a continuación.
El sitio Listverse elaboró un listado con los 10 casos más espeluznantes de personas enterradas vivas.
Si ser enterrado mientras aún respiras no era el mayor de tus miedos, posiblemente a partir de ahora sí lo sea.
10- Octavia Smith Hatcher
A fines del año 1800, un extraño y desconocido virus azotó al poblado de Pikeville, en Kentucky. Y uno de los casos más trágicos fue el de Octavia Smith Hatcher. Luego de que su pequeño hijo muriera en enero de 1891, Octavia cayó en una profunda depresión que la llevó hasta el coma. El 2 de mayo de aquel año, fue declarada muerta debido a la extraña enfermedad que había llegado al lugar.
Octavia fue enterrada rápidamente en el cementerio local. Pero lo que nadie sospechaba, es que a partir de este momento comenzaría realmente lo espeluznante del caso.
Una semana después del fallecimiento, muchas personas comenzaron a enfermarse de la misma manera que la mujer, y terminaban en estado de coma. ¿La diferencia? Luego de un tiempo, comenzaban a despertar.
El esposo de Octavia comenzó a temer de haberse apresurado en enterrar a su amada, por lo que decidió desenterrar el cadáver. Lo que vio después de abrir el féretro fue digno de una escena de la película de terror más escalofriante: sus uñas estaban quebradas y bañadas en sangre, y el ataúd por dentro estaba totalmente arañado.
Octavia aún estaba con vida al momento de ser enterrada. De hecho, en su rostro aún se podía notar una expresión de terror. Luego del incidente, el esposo de Octavia la volvió a enterrar en el mismo lugar, sin embargo colocó un monumento en honor a la horrible muerte que la mujer encontró. La estatua se mantiene en el lugar hasta el día de hoy.
9- Mina El Houari
Usualmente cuando estás en tu primera cita, piensas en las mejores opciones para que todo resulte bien. Sin embargo, nadie se esperaría terminar siendo enterrado vivo, como en el caso de la mujer en la siguiente historia.
Mina El Houari era una mujer francesa de 25 años, quién conoció a través del chat a un marroquí. Luego de algunos meses de constantes coqueteos, Mina viajó hasta Marruecos para conocer en persona al sujeto. La esperada cita se llevó a cabo el 19 de mayo de 2014 en la casa del hombre, pero producto de una diabetes, la mujer cayó en coma.
El joven pensó que había muerto, y por razones que no son del todo claras, decidió enterrarla en el patio de su casa. La mujer seguía aún con vida, pero murió producto de asfixia. Luego de unos días, la familia de Mina alertó a las autoridades sobre su desaparición, y viajaron hasta Marruecos. Finalmente lograron dar con el hombre, quién confesó el crimen por lo que enfrenta cargos por asesinato.
8- Señor Boger
En julio de 1893, un granjero llamado Charles Boger vivía junto a su esposa, quien repentinamente murió por causas desconocidas. Los médicos confirmaron su fallecimiento, por lo que fue enterrada.
Esto debió ser el final de la historia. Sin embargo, tiempo después del funeral, un amigo le comentó a Charles que su esposa había sufrido anteriormente de ataques de histeria, hecho que el viudo desconocía. Debido a esto, comenzó a rondar en su cabeza la idea de que en verdad la mujer no había muerto, sino que más bien pudo haber sufrido un profundo cuadro de este trastorno.
El atormentado hombre decidió desenterrar el cadáver, y lo que vio fue macabro. Su esposa estaba en posición contraria a la que había sido enterrada, y cubierta totalmente en sangre. Casi no le quedaban dedos, presumiblemente debido a sus desesperados intentos por salir. Nunca se volvió a saber de Charles Boger después del incidente.
7- Angelo Hays
Corría el año 1937 en Francia, y el joven Angelo Hays de 19 años transitaba en su motocicleta como de costumbre. Un día, sufrió un grave accidente: chocó contra una pared de concreto, lo que le desfiguró totalmente el rostro. Su familia no tuvo autorización para ver el cuerpo, y las autoridades lo declararon oficialmente muerto. Tres días después fue enterrado.
No obstante, una compañía de seguros tuvo algunas sospechas luego de enterarse que el padre de Angelo había cobrado el seguro de vida de su hijo por unos 200 mil francos de la época, así es que enviaron a un inspector para investigar el caso.
Después de dos días del entierro, decidieron realizar una exhumación del cadáver. Grande fue la sorpresa de todos, al comprobar que el joven estaba en muy malas condiciones, pero con vida.
Luego de rescatarlo y ser enviado al hospital, el motoquero se pudo recuperar, y se transformó en toda una celebridad en su país.
6- Señor Cornish
Durante el siglo XIX, ocurrió el siguiente caso en la localidad de Bath, en Inglaterra. El señor Cornish era un alcalde muy querido y respetado por los ciudadanos, quién repentinamente murió debido a una fiebre. Luego de declararse su muerte, se ordenó su entierro.
El sepulturero se encontraba en la mitad del trabajo, cuando decidió ir por un refresco. Cuando volvió, comenzó a oír ruidos provenientes del ataúd. Fue ahí que se dio cuenta de que el señor Cornish había sido enterrado vivo, por lo que se apresuró en rescatarlo.
Pero todo fue en vano, ya que para cuando logró abrir la urna, el hombre ya había muerto producto de la falta de oxígeno. Esta historia afectó tanto a la hermana del fallecido, que pidió que la degollaran una vez declarada su muerte, para así evitar un lamentable incidente como el del señor Cornish.
5- La pequeña de 6 años que sobrevivió
La idea de ser enterrado vivo resulta espeluznante para todos. Pero si más encima la víctima se trata de un niño, es más terrorífico aún. Esto es lo que ocurrió en India, en agosto de 2014. Un matrimonio se acercó a una niña de 6 años, y le comentaron que debía acompañarlos hasta una feria en una aldea alejada del lugar.
Luego de llegar con la pequeña hasta una zona de cañas de azúcar, procedieron a estrangularla y enterrarla por razones aún desconocidas. Afortunadamente, algunos lugareños vieron entrar al campo a la pareja con la niña, pero después de ver que sólo el matrimonio salió del lugar, comenzaron a sospechar de que algo extraño había ocurrido.
Comenzaron a buscar en la zona, y encontraron a la niña inconsciente y apenas respirando. Rápidamente la llevaron hasta un hospital, lugar donde la pequeña recuperó la conciencia. A pesar de reconocer a los sospechosos a través de fotografías, no recordaba haber sido enterrada.
La policía aún no sabe las razones que llevaron al matrimonio a realizar la cruel acción en contra de la pequeña, y el paradero de la pareja es aún desconocido. A pesar de lo terrorífico del caso, afortunadamente la niña sobrevivió.
4- Enterrado vivo voluntariamente
Hasta el momento hemos revisado casos en los que las personas fueron enterradas o por error, o por la intervención de terceros. Pero lo que ocurrió en Rusia en 2011 escapa de toda lógica, ya que fue la misma persona la que pidió ser enterrada. Ocurrió en la ciudad de Blagoveshchensk, lugar donde un sujeto de 35 años decidió probar su valentía, además de atraer la buena suerte.
Pero lo que logró fue algo muy distinto. Con la ayuda de un amigo, cavó un hoyo en su patio, y creó un ataúd bastante artesanal. Se preocupó de agregarle tubos para que entrara algo de oxígeno, y se enterró junto a un celular y una botella con agua. A los pocos minutos de consumado el entierro, el sujeto llamó al hombre bajo tierra, y comprobó que estaba en buen estado.
Sin embargo al día siguiente cuando volvió a desenterrarlo se llevó cruda sorpresa: su amigo estaba muerto. La mala suerte hizo que justo esa noche lloviera torrencialmente, por lo que los precarios tubos de oxígeno que permitían el ingreso de oxígeno se taparon.
Si bien esta historia es bastante trágica, lo más perturbador es que esta práctica fue algo bastante común entre los jóvenes rusos de aquel año, por lo que probablemente ocurrieron otros casos similares.
3- Lawrence Cawthorn
Otra historia relacionada con personas enterradas vivas, proviene de un panfleto llamado “Los accidentes más lamentables y deplorables”. Sucedió en Londres en el año 1661, cuando un carnicero llamado Lawrence Cawthorn “murió” luego de estar un tiempo enfermo. La propietaria de la casa en la que vivía estaba ansiosa, ya que la ley le permitía heredar sus posesiones, por lo que lo enterró rápidamente, sin la consulta de un médico.
Cuando los dolientes visitaron la tumba, comenzaron a escuchar desesperados y desgarradores gritos que provenían del ataúd. Rápidamente intentaron rescatarlo, sin embargo, para cuando lograron abrir el féretro, Cawthorn ya estaba muerto.
Su cabeza estaba bañada en sangre producto de los cabezazos que el hombre se dio para tratar de salir. Sus ojos estaban completamente hinchados.
La mujer fue acusada de haberlo enterrado prematuramente, y el caso se volvió una leyenda por cientos de años.
2- Sipho William Mdletshese
En 1993, un joven sudafricano de 24 años llamado Sipho William Mdletshese se vio envuelto en un grave accidente de tránsito. Iba junto a su novia, quién sobrevivió, pero Sipho quedó con heridas tan graves que fue declarado muerto.
El cuerpo fue llevado al mortuorio de Johannesburgo, y puesto en una caja de metal para luego ser enterrado. Pero el joven no estaba muerto, sólo había quedado inconsciente producto del choque. Pasaron dos días hasta que despertó dentro del ataud, y totalmente confundido comenzó a gritar desesperadamente por ayuda.
Afortunadamente, algunos trabajadores de la morgue lo escucharon, y lo sacaron con vida. Pero para aumentar la dosis de mala suerte en el caso, cuando fue hasta el hogar de su pareja, fue echado airadamente que la mujer pensó que se trataba de un zombie. Como si ser enterrado vivo no fuese suficiente.
1- Stephen Small
En 1987, un millonario de 37 años llamado Stephen Small fue secuestrado y enterrado vivo en un lugar cercano al poblado de Kankakee. Los asaltantes, Danny Edwards de 30 años y su pareja, Nancy Rish de 26, idearon un plan en el que a través de un tubo permitirían el ingreso de aire al hombre, además de darle agua para mantenerlo con vida. Exigían el pago de 1 millón de dólares.
Pero todo salió mal, ya que la arena comenzó a bloquear el acceso de oxígeno, y Small murió asfixiado antes de que los secuestradores pudiesen cobrar el rescate. La policía logró dar con el cadáver gracias a que el Mercedes del fallecido se encontraba cerca.
La pareja fue puesta en la cárcel, sin embargo, se generó un intenso debate en la opinión pública sobre si su intención fue realmente la de asesinar al hombre o no. Cualquiera sea la respuesta, el horrible crimen tuvo nefastas consecuencias, y los culpables deberán pasar otros 27 años más tras las rejas.