Un bombardeo contra una ceremonia de matrimonio en Yemen se saldó con la muerte de 131 personas, incluyendo mujeres y niños, un error del que se acusa a la coalición árabe que niega estar implicada.

El ataque, que se produjo el lunes en Wahijah, cerca de la localidad de Mokha, controlada por los rebeldes chiitas hutíes, es el peor cometido contra civiles desde el inicio de la intervención en marzo de la coalición árabe liderada por Arabia Saudita en Yemen.

Un responsable provincial de Salud dijo el martes a la AFP que el ataque aéreo contra una sala donde se festejaba una boda dejó 131 muertos, revisando al alza un precedente balance de 40 muertos.

Un médico, Mayaz al-Hammadi, del hospital Al-Riffi, donde fueron transportados los cuerpos de las víctimas, confirmó este nuevo balance.

Asimismo, en Ginebra, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos dio la misma cifra. “Si las cifras son tan altas como parece, puede tratarse del incidente más mortal desde el inicio del conflicto“, declaró el portavoz del Alto Comisionado, Rupert Colville.

“Totalmente falsas”

Varios habitantes de la zona afirmaron que esta tragedia fue causada por un ataque aéreo de la coalición árabe liderada por Arabia Saudita, formada en marzo para apoyar al presidente de Yemen, Abd Rabo Mansur Hadi, frente a los rebeldes hutíes, aliados a Irán.

El portavoz de los insurgentes, Mohamed Abdessalam, denunció “un crimen cometido por la aviación saudita” y acusó a la ONU de alentar con “su silencio” estas operaciones cometidas contra civiles.

Pero la coalición árabe asegura que “no ha perpetrado bombardeos en esta región en los últimos tres días”.

Las informaciones que imputan ese ataque a la coalición son “totalmente falsas”, dijo a la AFP su portavoz, el general de brigada Ahmed Al-Assiri, quien aseguró que la coalición “admite siempre sus errores cuando comete uno”.

Es algo montado por los hutíes“, dijo a la AFP una fuente de la coalición, insinuando que el drama fue provocado por un bombardeo rebelde.

En un comunicado, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó “este ataque aéreo” y presentó su pésame a las familias.

Ban Ki-moon recordó que “no hay una solución militar al conflicto de Yemen“, y pidió de nuevo a las partes “el cese inmediato de las actividades militares” y la búsqueda de una solución mediante negociaciones, con ayuda de su enviado especial.

Numerosas víctimas civiles

No es la primera vez que se acusa a la coalición árabe, que controla el espacio aéreo yemenita, de matar a civiles en sus bombardeos. En agosto, 17 civiles murieron en un ataque aéreo contra una fábrica embotelladora de agua y 65 en un ataque que impactó a una residencia de empleados de una central eléctrica en julio en Mokha.

La coalición árabe dominada por las monarquías sunitas del Golfo lleva a cabo bombardeos intensivos en Yemen para frenar el avance de los hutíes e impedir que estos tomen el control de Yemen, vecino de Arabia Saudita.

Desde julio, dirige operaciones en el terreno contra los hutíes y sus aliados, unidades del ejército fieles al expresidente Ali Abdalá Saleh.

Desde el inicio del conflicto que ha provocado también una grave crisis humanitaria, unas 5.000 personas han muerto, casi la mitad civiles, según la ONU.