El papa Francisco recomendó a las congregaciones religiosas que han transformado los conventos vacíos en hoteles que paguen los impuestos “como cualquier hijo de vecino”, en una entrevista concedida a la emisora portuguesa “Radio Renascença”.

Las congregaciones religiosas son propietarias en Italia de inmensas instalaciones y conventos históricos, algunos de ellos convertidos en céntricos hoteles, varios de lujo, que no pagan impuestos por las exenciones que goza la Iglesia Católica, lo que genera muchas críticas y polémicas.

“Algunas congregaciones dicen ‘ahora que está el convento vacío, vamos a hacer un hotel, un ‘albergo’, y podemos recibir gente y, bueno, y con eso nos mantenemos o ganamos dinero’. Bueno, si querés hacer eso, pagá los impuestos. Un colegio religioso si, porque el religioso está exento de impuestos, pero si trabaja como hotel, que pague los impuestos como cualquier hijo de vecino. Si no el negocio no es muy sano”, afirmó Francisco.

Según cifras oficiales, se calcula que el inmenso patrimonio inmobiliario de la iglesia italiana, entre colegios, universidades, clínicas, casas de reposo, hoteles, restaurantes y centros deportivos, es de cerca 100.000 edificios por un valor de 9.000 millones de euros.

Las palabras del papa argentino fueron muy bien recibidas por varios concejales de Roma, que desde hace años denuncian la competencia desleal por parte de la iglesia romana al sector del turismo al convertir conventos en hoteles que no aportan beneficio económico a la ciudad.

Roma además se prepara para la ‘invasión’ de turistas y peregrinos para el Jubileo extraordinario convocado por el papa, que comenzará oficialmente el 8 de diciembre y culminará el 20 de noviembre del 2016.

Según los datos publicados por el centro de estudios Censis, se esperan 33 millones de personas de todo el mundo, ocho más, en comparación con el Jubileo del año 2000, cuando se registraron 25 millones de personas.