Estados Unidos condenó este viernes lo que consideró “un brutal ataque terrorista” después de que colonos judíos incendiaran viviendas de palestinos, lo que provocó la muerte de un bebé de 18 meses.
Un comunicado del Departamento de Estado urge a Israel a “detener a los asesinos” y llamó a ambas partes a “impedir una escalada de tensiones a raíz de este incidente trágico”.
El portavoz del Departamento, Mark Toner, dijo que Washington “condena en los términos más firmes el brutal acto terrorista de la pasada noche en la localidad palestina de Duma”.
En la madrugada de este viernes colonos israelíes lanzaron bombas incendiarias contra dos viviendas en la localidad de Duma, cerca de Naplusa, en el norte de Cisjordania, a través de las ventanas, que estaban abiertas debido a las altas temperaturas. La madre, el padre y el hermano del menor muerto, Alí Saad Dawabsha, de 18 meses, tienen quemaduras graves, y están en riesgo de vida.
La pequeña vivienda familiar quedó destruida por el fuego. Los agresores pintaron en las paredes la estrella de David y las leyendas en hebreo “Revancha” y “Larga vida al mesías”.
Inmediatamente estallaron protestas en la comunidad palestina, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, condenó lo que calificó como un “acto terrorista”.
Los palestinos, en tanto, consideran al gobierno israelí plenamente “responsable” del ataque, al que tildaron de “crimen de guerra”.