Cuando una aplicación recolecta tus datos a cambio de una descarga gratis o de bajo costo, ¿cómo puedes estar seguro de que los desarrolladores de esas aplicaciones sean legítimos, de que su seguridad sea robusta, y de que todo tu teléfono (incluyendo tus conversaciones) no serán usados por un estafador? La respuesta es sencilla: no puedes.
Si bien la seguridad para la mayoría de las aplicaciones es confiable, los desarrolladores no son perfectos, ni tampoco sus aplicaciones.
Aquí presentamos las cinco preguntas que debes hacerte antes de descargar una aplicación.
1. ¿Debo usar esta aplicación?
Es una pregunta sencilla, pero debido a que muchos -no sólo los niños y adolescentes- descargan aplicaciones porque “todo mundo las usa” esta pregunta se vuelve pertinente, y es un recordatorio para considerar la privacidad y la seguridad al descargar.
2. ¿Quién desarrolló esta aplicación?
Su app store puede incluir información sobre la compañía que desarrolló una aplicación en su descripción. Sin embargo, si la aplicación no tiene un nombre de contacto, página web o email, puede ser que no sea una aplicación confiable.
3. ¿Quién está utilizando esta aplicación?
Echa un vistazo a los comentarios de los clientes en la app store y en las revisiones de Google, para ver si ha habido alguna queja. Asegúrate de que los comentarios sean legítimos. Busca errores tipográficos o de mala ortografía, lo que podría ser un indicio de un comentario falso. ¿No hay comentarios? Tampoco es un buen signo.
4. ¿Qué información voy a entregar?
Nada es gratuito. Muchas aplicaciones solicitan acceso a sus contactos, su número de teléfono, calendario, o ubicación. Asegúrate de hacer una pausa y considerar cada pregunta que se hace, sin importar lo emocionados que estés con la aplicación.
5. ¿La aplicación explica los permisos que estoy otorgando?
El leer la sección de permisos de la aplicación no es la prioridad en la lista de diversión, pero puede que no te arrepientas de hacerlo. Frecuentemente otorgamos a una aplicación diversa información así que debes evaluar el intercambio.
¿Tu teléfono fue invadido?
Una señal de que tu teléfono ha sido infectado con malware es que puedes enviar textos o correos electrónicos al azar sin que lo hayas hecho realmente. Algunos programas maliciosos gastarán tu batería, transferirán tus datos a un tercero, o harán que tu factura de teléfono se eleve de manera exorbitante.
También puedes observar aplicaciones en tu teléfono que no descargaste. Si el malware pasa por tus aplicaciones puede desinstalarlas, incluso puede ser necesario restaurar las configuraciones del teléfono por completo. Para estar protegido en el futuro, asegúrate de mantener como privadas las configuraciones de las aplicaciones que utilizas y descarga una herramienta de seguridad móvil, recomiendan desde la empresa de seguridad McAfee.
