Frente al inminente inicio del invierno, los vehículos necesitan de una preparación previa para evitar futuros problemas y prevenir accidentes.
Es por ello que es importante que las personas tomen conciencia de ello y se aseguren con algunas tomando medidas simples.
El Coordinador de Área Mecánica de INACAP Concepción-Talcahuano, Héctor del Pino, recuerda que el vehículo en general debe ser sometido varios chequeos preliminares para un mejor funcionamiento, entre los que destaca:
1. Asegurarse de tener una batería en buenas condiciones.
Con el frío y las bajas temperaturas, la batería pierde eficiencia y se notará que no tiene tanta energía como en un día de verano y la fuerza para mover al motor es menor. Además, con 2 o 3 arranques puede quedar sin batería. Además, se debe recordar que la vida útil de una batería en excelentes condiciones va de 2 a 3 años.
2. Tener los niveles del refrigerante en condición normal, tanto en el radiador, como en el depósito de compensación
Este líquido debería ser remplazado por lo general cada 40 a 60 mil kilómetros, si no lo ha hecho, se sugiere que lo haga, ya que es quién ayuda al sistema de refrigeración para mantener al motor a su temperatura óptima. Además, le ayudará a que su sistema de calefacción o climatización funcione correctamente.
3. Tener los cambios de aceite al día
Normalmente se utiliza un aceite multigrado (sirve para verano e invierno), por lo tanto, no hay cambiar el tipo de aceite para este período, pero sí realizar los cambio a 5.000; 10.000; 15.000 km o más según especificación.
4. Comprobar estado de los neumáticos
Aunque el mercado ofrece neumáticos para lluvia, normalmente para nuestra zona los vehículos vienen con neumáticos que sirven para cualquier clima, ya que no es severo. Sin embargo, lo trascendental es la huella, ésta debe tener como mínimo 1,6 mm de profundidad, menos que eso debe remplazarlo.
También si observa una protuberancia en un costado, quiere decir que el neumático fue golpeado y se rompió una capa lateral, lo que ha debilitado al neumático y debe cambiarlo, y ahí debe hacerlo a lo menos con los dos delanteros o traseros, privilegiando en donde existe la tracción.
5. Mantener la presión de inflado en los neumáticos y revisarlo cada semana
Además debe tener precaución que sea parejo según la carga, dicha especificación está en algún pilar del lado del conductor.
6. Realizar el afinamiento de motor o la respectiva mantención por kilometraje
Esto ayudará a una partida más eficiente, trabajo estable del motor, respuestas rápidas, y la verificación que todo está en óptimas condiciones.
7. Cambiar los limpiaparabrisas
Een algunos casos la plumilla completa o en otros casos sólo la goma. Con el calor éstas se endurecen y pierden efectividad de limpieza, además que comienzan a rallar el parabrisas. Esta verificación debe hacerla anualmente.
8. Tener líquidos que ayudan a la limpieza del parabrisas
Existen en el mercado líquidos que ayudan a la limpieza del parabrisas con lluvia, de esta manera se utiliza muy poco el limpiaparabrisas, ya que agua escurre hacia los lados en forma de gota por la misma velocidad del vehículo, dejando a su vez buena visibilidad. Cada envase tiene la especificación de uso.
9. Limpieza de la carrocería y encerar antes que lleguen las lluvias
Se sugiere hacer una limpieza de la carrocería y encerar antes que lleguen las lluvias, esto protegerá el vehículo y el agua, el barro, la suciedad del camino, escurrirá con mayor facilidad, dando más vida a la carrocería.
10. Revise las luces del vehículo
Con lluvia se tiene menos visibilidad y por ende mientras usted sea visible a los demás, con todas sus luces funcionando, corre menos riesgos (se sugiere tener ampolletas de remplazo), en algunos casos debe recurrir a un especialista para que le ayude al remplazo, para evitar deterioros del vehículo. Refiérase al manual del propietario de su vehículo, ahí se le indicará el tipo de ampolleta, según sea la luz, cómo remplazarla o si debe solicitar ayuda.