El vicepresidente argentino, Amado Boudou, sumó este viernes su segundo procesamiento, esta vez por falsificación de documento público en una investigación por la supuesta compra irregular de un automóvil hace 20 años, informó una fuente judicial.

Boudou, que está en Colombia, donde asistió a la toma de posesión del presidente Juan Manuel Santos, se convirtió en junio en el primer vicepresidente procesado en ejercicio de sus funciones en otra causa, por presunta corrupción en un caso cuando era ministro de Economía en 2010.

El nuevo procesamiento fue dictado el viernes por el juez Claudio Bonadío, por el delito de “falsificación de documento público, en carácter de partícipe necesario”, en la compra de un automóvil importado con documentación que tenía datos falsos, hace dos décadas.

“Se ha probado que Amado Boudou inscribió a su nombre con un formulario 08 (transferencia de vehículos) falso que contiene copias de su documento nacional de identidad(…)”, señala el escrito del juez, divulgado por el Centro de Información Judicial (CIJ), sitio del Poder Judicial.

El magistrado embargó además los bienes del vicepresidente por 10.000 pesos (1.200 USD).

El juez procesó también a la titular del vehículo Graciela Taboada de Piñero, como autora, y a Agustina Seguin, ex novia de Boudou, como partícipe necesaria.

La acción había sido iniciada en 2010 por Daniela Andriuolo, exesposa de Boudou, que le reclamó una suma por un Honda CRX Del Sol, una coupé color rojo, que había comprado el ahora vicepresidente cuando ya estaba separado pero mucho antes de terminar el divorcio en 1998, y que usaba su novia Seguín.

En una declaración por escrito ante el juez, Boudou había responsabilizado a los gestores de la operación.

El funcionario sostuvo entonces que “resulta obvio que no ha tenido como motivación ocultar el bien, sino todo lo contrario”, dijo.

Procesado en junio en otra causa, Boudou enfrentó el miércoles pasado a la oposición en el Senado, que pidió en vano que se aparte de sus funciones y se retiró de una sesión que él presidía.

La oposición en el Congreso intentó el mes pasado aprobar un juicio político en su contra que no prosperó porque el oficialismo controla ambas cámaras.

El vicepresidente fue acusado de haberse quedado -a través de la empresa fantasma The Old Fund y de un testaferro-, con 70% de la empresa Ciccone, que tiene el monopolio de la impresión del papel moneda, a cambio de haber intervenido para evitar la quiebra de esa firma.

Boudou apeló el procesamiento y sigue ejerciendo con normalidad la vicepresidencia y presidencia del Senado argentino con el respaldo de la mandataria Cristina Kirchner.