El gobierno español hizo entrega este martes a Colombia de una colección de casi 700 piezas de arte precolombino, confiscada durante una operación contra narcotraficantes en 2003, estimada en cerca de siete millones de dólares y de incalculable valor cultural.
Vasijas con forma humana o decoradas con cabezas de animales, cuencos de cerámica con dibujos geométricos en tonos ocres, pequeños instrumentos musicales, collares, utensilios para pintarse el cuerpo: un total de 691 piezas que datan desde 1400 a.c. hasta el siglo XVI fueron restituidas.
“Hoy es un día muy especial para Colombia”, afirmó su embajador en Madrid, Fernando Carrillo Flórez, tras firmar las actas de entrega con varios responsables españoles en el Museo de América de Madrid.
“La llegada de estas casi 700 piezas a Colombia es uno de los acontecimientos culturales más importantes de los últimos tiempos”, aseguró, precisando que el ministerio de Cultura de su país dará un “lugar de honor” a la colección, en un museo aún por decidir.
Entregadas oficialmente este martes, las obras no viajarán a Bogotá hasta julio o agosto, una vez finalizado el delicado proceso de embalaje.
Fue una operación policial en 2003 contra una red de tráfico de droga la que permitió descubrir 885 piezas arqueológicas, “compradas en Colombia y otros países”, en el domicilio madrileño de uno de los 29 detenidos de nacionalidad colombiana y española, explicó el director general de la policía Ignacio Cosidó.
Comenzó entonces un proceso de cooperación entre las autoridades de ambos países que permitió acreditar “la pertenencia de 691 piezas al patrimonio cultural colombiano y su exportación ilegal” y determinar que otras 42 de ellas eran falsa, afirmó.
Sin embargo aún queda por determinar a quién pertenecen las 150 obras restantes.
El valor de la colección restituida a Colombia “estaría por encima de los cinco millones de euros debido a la rareza de las piezas”, explicó Cosidó.
Pero “mucho más allá de su valor económico tiene que ver con lo más profundo de sus raíces, que es expresión de su propia historia, de su propia cultura y me atrevería a decir del alma de la nación colombiana”, agregó.
Calima, Nariño, Tuncahuán, Piartal, Quimbaya, Sinú, entre otras, todas las culturas del país están representadas en esta colección, “pequeño museo de la arqueología de Colombia” en palabras del director general de Bellas Artes del ministerio de Cultura español, Jesús Prieto.