Después de la aplastante derrota sufrida ante Holanda, Vicente del Bosque optó por una regresión y buscó entre sus archivos alguna formación que pudiera lastimar mañana a Chile. En su horizonte figuró una, la utilizada contra Uruguay en la Copa de confederaciones del año pasado.

La particularidad de esa alineación consistió en destruir el dúo Busquets-Xabi Alonso para agregar otro hombre al ataque. Así Del Bosque paró una España con un 4-1-4-1 que resultó efectivo para derrotar 2-1 al cuadro charrúa.

España se ve en la obligación no de ganar, sino de golear al combinado nacional, y esa formación totalmente agresiva, que presionó la salida de los uruguayos en todo momento promete. Además, otro punto a favor con el que cuenta Del Bosque es que esa tarde el conjunto ibérico mostró uno de sus mejores partidos en la era Vicente.

Si España opta por este sistema, Sergio sería el indicado para cubrir el medio campo al tener la confianza del técnico. Xabi Alonso, que fue sustituido ante Holanda, iría a la banca.

David Villa, el hombre que le marcó a Chile en el pasado mundial de Sudáfrica iría por el costado derecho. Así el “guaje” se sumaría a la línea de cuatro centrocampistas con vocación ofensiva. El delantero, que no brilló frente a los holandeses, es el “pichichi” de su selección, y acumula hasta el momento 58 “pepas”.

Dentro del plantel los ibéricos están confiados en hacer una buena presentación frente a Chile. Cesc y Alonso se mostraron positivos a la hora de variar en el esquema, con el fin de volverse más agresivos, para presionar y no dejar jugar a la roja.