Mañana sábado 26 de abril se llevará a cabo el cambio de hora. Todos tendrán que retroceder su reloj en una hora, ganando así 60 minutos más de sueño o bien de “carrete”. Cada vez que ocurre esto nuestra vida cotidiana se ve afectada, ya sea porque nuestros aparatos tecnológicos no se modifican o bien porque nuestro cuerpo demora en acostumbrarse.

Con este cambio, las rutinas biológicas se ven afectadas en gran parte, pese a que es sólo una diferencia de una hora.

La neuróloga especialista en sueño de la Red de Salud UC, Julia Santin, indicó en entrevista con Expreso Bío Bío que es muy importante enseñar a los niños y ayudarles a ellos también con el cambio, poniendo rutinas estrictas para cumplir, con la importancia de que duerman entre 7 y 8 horas seguidas diariamente.

Por otro lado, indicó que para ayudar al cuerpo a no descontrolarse mucho, es importante desconectarse y apagar las pantallas brillantes de televisores, computadores y celulares, ya que la alta luminosidad provoca el rechazo de la melatonina, hormona encargada de provocarnos el sueño.

Santin agregó que lo ideal es que el horario se cambiara los viernes, porque ahí tendríamos dos días para ajustar nuestra rutina, aunque declaró también que sería aún mejor que no se provocara este cambio de hora.

“En general la luz provoca un aumento del ánimo. El que haya luz hace que despertemos de mejor humor”, señaló, agregando que el cambio de hora no es beneficioso desde un punto de vista de seguridad.

“Nosotros tenemos un reloj biológico interno que depende de la luminosidad”, señaló, y detalló que algunas personas que deben poner varias alarmas para ir despertando en forma progresiva es porque tienen un trastorno de sueño importante.

Escucha todos los consejos y recomendaciones para enfrentar sin sueño este cambio de hora, en la entrevista realizada por Scarleth Cárdenas y Patricio Cuevas, en Expreso Bío Bío: