Autoridades comunales y de la provincia de Ñuble dieron a conocer que no hubo mayores inconvenientes en la evacuación de los habitantes de la zona costera por la alerta de tsunami. Eso sí se evalúan algunas situaciones que alertaron los vecinos.

Fueron cerca de 3.300 personas las que debieron alejarse del borde costero y esperar instrucciones de las autoridades en zonas seguras, ante las posibles variaciones de marea por el sismo de 8.2 grados en Tarapacá, las que finalmente no fueron percibidas en el Bío Bío.

Recorriendo el sector de Lobería en Cobquecura, uno de los lugares que presenta un mayor riesgo en caso de tsunamis, la gobernadora Lorena Vera recibió varias observaciones de vecinos, por ejemplo sobre un puente que sólo tiene una vía y la falta de luminaria, lo que pudo dificultar la evacuación.

Allí también revisaron los muros de contención de la costanera y que ya resultaron dañados tras las marejadas de mediados del año pasado en la zona. Luego visitaron las vías de evacuación hacia el cerro El Calvario, donde se requiere mejorar el camino de acceso y la instalación de luminarias con paneles solares, independientes del suministro eléctrico.

“Nos hemos dado cuenta que los comités de emergencia, tanto comunales como el provincial, están funcionando y eso nos da la tranquilidad de que los vecinos están preparados, están evacuando. Estamos revisando si es que hay algo que deba mejorarse”, explicó la autoridad.

Por su parte, el alcalde Osvaldo Caro destacó la tranquilidad y participación de los vecinos, junto al trabajo de Bomberos, Carabineros y funcionarios municipales, quienes ayudaron a evitar incidentes en sectores como Buchupureo, Collai y Taucú.

En la oportunidad, el jefe comunal aprovechó la presencia de la gobernadora para presentarle distintos problemas que pueden presentar riesgos en invierno, como la falta de limpieza de ríos y proyectos pendientes del Serviu.

Wilson Ponce (RBB)

Wilson Ponce (RBB)